El día de ayer, el Congreso aprobó al contrareforma universitaria, lo cual permitiría el regreso de las universidades no licenciadas.
La ley que “establece la autonomía y la institucionalidad de las universidades peruanas” fue aprobada por el Congreso con 69 votos a favor. Pero esto, en realidad, debilita totalmente a la Superintendencia Nacional de Educación Superior (Sunedu).
Esta medida modificará la conformación del Consejo Directivo de la Sunedu, el cual estará integrado ahora por dos representantes de las universidades estatales, uno de las privadas, uno del Concytec, uno del Sineace, uno del Minedu y finalmente con uno del Consejo de los Decanos de Colegios Profesionales del Perú.
Previamente al debate y la votación de la misma, la oficina de la ONU en nuestro país había expresado su preocupación ante esta nueva ley, pues “podría ocasionar un serio retroceso en términos del adecuado diseño y supervisión de las políticas nacionales, la calidad educativa y el derecho a la educación sexual integral de las y los estudiantes”.
La medida recibió el apoyo total de las bancadas de Renovación Popular (9), Fuerza Popular (24) y el voto dividido de Perú Libre (21), Acción Popular (5), Alianza para el Progreso (1), Avanza País (4), Somos Perú (3) y Podemos Perú (2). Esta decisión aún se debe ratificar en una segunda votación.
En caso que se ratifique esta decisión por parte del Congreso, la congresista Flor Pablo anunció que presentará una demanda de inconstitucionalidad.
Ante esta decisión tomada por el parlamento, 16 universidades defendieron la reforma universitaria y la describieron como “una ley que se alcanzó con imparcialidad y calidad profesional de la Sunedu”.
El superintendente Oswaldo Zegarra afirmó en una entrevista para el diario Perú21 que se convocará a una reunión extraordinaria del Consejo Directivo para analizar la reciente decisión del Congreso y considera que la segunda votación será decisiva.
“Con la nueva norma se regresaría a la Ley 23733, que fue cambiada por la Ley Universitaria (Ley 30220). En esa época, en que predominaba la primera ley, había una autocracia de las universidades, sin ninguna presencia del Estado; ese fue el motivo para que se profundice la crisis universitaria. Ahora, es regresar a ello. Buscan capturar el órgano regulador para, de acuerdo a sus inclinaciones, más políticas que técnicas, modificar la Sunedu”, agregó.
