La economía latinoamericana crecerá sólo 2,1% este año, según las últimas proyecciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Se aproxima una fuerte desaceleración del crecimiento de la economía, mientras existen bajos niveles de inversión y productividad, y una lenta recuperación del empleo, con poco espacio para las maniobras fiscales, en un contexto de un previsible aumento de las tasas de interés y de depreciaciones de las monedas locales. Esto ocurre en medio de severas disrupciones en las cadenas de suministro que mueven los productos desde las fábricas chinas al resto del planeta, junto con una ola global de inflación, que en Estados Unidos llegó a 7%, el nivel más alto en los últimos 39 años.
Como primer factor se considera que el crecimiento de la economía mundial previsto para 2022 será menor que el del año pasado, acercándose a un 4,9%, según las proyecciones de la Cepal. En ese contexto, los dos mayores socios comerciales de Latinoamérica, Estados Unidos y China, seguirán esa tendencia de desaceleración económica, afectando la recuperación de los países de la región. Por lo pronto, es probable que los cuellos de botella en las cadenas de suministro persistan por varios meses, acelerando los costos del transporte marítimo y haciendo más lento el flujo del comercio internacional.
Otro factor importante será que las condiciones financieras serán más restrictivas en la medida que las presiones inflacionarias persistan. Si continúa el aumento en el costo de la vida, es probable que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por sus siglas en inglés) y los bancos centrales de otros países ricos suban las tasas de interés para controlar la situación. «En la medida en que aumente la percepción de que las tasas de interés en el mundo desarrollado van a subir, se generarán condiciones más restrictivas para el acceso al financiamiento por parte de nuestros países», explica Titelman.
Se ha vuelto más caro pedir un crédito y, por esa razón, muchas personas tienen dificultades para adquirir una vivienda.
Los economistas proyectan que, si la inflación continúa alta, es probable es que las tasas de interés sigan subiendo, aunque eso dependerá de la situación de cada país.
Finalmente, el precio de las materias primas. La proyección de la Cepal es que los precios se mantengan en el nivel el que están actualmente o que experimenten una leve caída respecto a 2021. Los países que han resultado más favorecidos con el alza en los precios de las materias primas han sido los exportadores de hidrocarburos.