EDUARDO FARAH H.
Estamos en víspera de la realización de la VIII Cumbre de Las Américas, con la ausencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump y del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Nosotros estamos pasando por un episodio en nuestra vida republicana bastante difícil ya que la corrupción ha corroído las entrañas de nuestro país y tenemos de todas maneras que cambiar y enseñarle a los jóvenes que es imposible vivir de esta manera.
El país necesita por muy duro que sea, limpiar la forma de vida que hay en este momento, necesitamos devolver la esperanza de un buen trato, de tal manera que los jóvenes de la selva, de los andes y de la costa vean que siendo un buen ciudadano consiguen construir hospitales, carreteras, colegios, porque esto se debe hacer entre todos los que piensan que el país es un país sano, un país con futuro; no un país de vivos como muchos se creen.
¿Que va a hacer un joven que sale del colegio y no consigue trabajo? ¿Que va a llevar a su casa para alimentar a los suyos? Hay que crear trabajo y hay que procurar que todos empujen hacia adelante.
Las palabras suenan bonitas, pero los hechos son los que mandan y es lo que necesitamos, como alguien dijo alguna vez “hechos y no palabras “; ojalá que en esta VIII Cumbre de Las Américas cuyo tema central será Gobernabilidad Democrática Frente a la Corrupción, no sean sólo palabras, sino que encuentren un derrotero para vencer a esta lacra que se llama corrupción.