Un incendio de gran magnitud en Quillabamba, Cusco, ha destruido 250 hectáreas de bosques de reforestación y cultivos en la zona, poniendo en riesgo a comunidades locales y su economía.
Un grave incendio forestal ha arrasado con un área significativa de bosques de reforestación y cultivos en la ciudad de Quillabamba, capital de la provincia de La Convención, en la región Cusco. Según informó Randolph Béjar Farfán, jefe de la Compañía de Bomberos Quillabamba 57, el siniestro, que inició en el cerro Macamango y sus alrededores, ya ha consumido aproximadamente 250 hectáreas, afectando también cultivos de cacao, café y otros productos esenciales para la economía local.
Béjar Farfán señaló que la magnitud del incendio ha superado la capacidad local para controlarlo, a pesar de los esfuerzos de 150 voluntarios, bomberos forestales, personal del Ejército, policías y trabajadores municipales. El comandante expresó su preocupación por la falta de herramientas y recursos, como mochilas de agua y palas, necesarios para contener el fuego.
Lee también:
Intenso esfuerzo por controlar incendio en el santuario histórico de la Pampa de Ayacucho
Las operaciones de respuesta incluyeron un sobrevuelo en helicóptero por parte del Ejército en las primeras horas de la mañana, lo que permitió identificar focos activos de fuego y una densa capa de humo que complicó las labores de extinción. Béjar Farfán explicó que las condiciones climáticas, sumadas a la alta combustibilidad de la resina de los pinos y eucaliptos, han dificultado aún más el control del incendio.
Además de la pérdida de flora, el siniestro ha destruido fauna local y afectado a caseríos donde se encuentran cultivos y panales de abejas, lo que supone un duro golpe para las familias que dependen de estos recursos. La situación se ha vuelto crítica en sectores como San Pedro, Alejuyoc, Macamango y Serranuyoc, donde las condiciones climáticas adversas amenazan con empeorar el escenario.
Las primeras investigaciones indican que el incendio pudo haber sido provocado por una quema controlada realizada por una asociación de viviendas, la cual se descontroló rápidamente y se propagó hasta alcanzar las cumbres en cuestión de minutos.
Las autoridades locales y los bomberos continúan trabajando para controlar el fuego y evitar mayores daños, mientras hacen un llamado urgente a la población para que apoye con herramientas y recursos necesarios para enfrentar esta emergencia.