En medio de irregularidades detectadas
Una reciente auditoría realizada por la Contraloría General de la República ha revelado serias irregularidades en la Policía Nacional del Perú (PNP), en relación con la desaparición de 17 caballos y 28 perros de las instalaciones de la institución.
El informe de control, que corresponde al inventario de noviembre, ha puesto al descubierto una serie de anomalías en la gestión de los animales.
La Contraloría, tras los hallazgos, requirió explicaciones al comandante general de la Policía, Víctor Zanabria. No obstante, hasta ahora no se ha confirmado si la solicitud fue atendida.
Según los resultados de la auditoría, en la Unidad Histórica de Policía Montada, ubicada en el Cuartel de El Potao, en el distrito de El Rímac, se encontró una discrepancia considerable entre los caballos registrados en el inventario y los realmente presentes en las instalaciones.
Lee también:
Tejidos artesanales en las alturas de Lima: tradición y arte en las alturas
En el reporte anterior, realizado a finales de octubre, se contabilizaban 122 caballos en esta dependencia policial. Sin embargo, tras la última inspección de la Contraloría, solo se encontraron 105 caballos, lo que significa una ‘ausencia’ de 17 animales no registradas.
El valor de los caballos que desaparecieron se estima entre 7 mil y 10 mil soles cada uno, lo que convierte la desaparición de estos animales en una pérdida considerable de recursos.
El hallazgo más sorprendente fue que, además de los caballos faltantes, se encontraron seis caballos y un poni que no pertenecían a la Policía Nacional. Estos animales, según la auditoría, eran alimentados y cuidados con recursos públicos.
La presencia de animales ajenos a la institución en las instalaciones de la Policía Montada ha puesto también en evidencia posibles irregularidades en el manejo y control de los bienes de la PNP, lo que podría involucrar un uso indebido de fondos públicos.
Unidad Canina
El Informe de Control N. º 078-2024-OCI/3792-SVC también aborda la situación en la Unidad de la Policía Canina, cuya responsabilidad es el cuidado y manejo de los perros utilizados en diversas funciones de la policía, como la detección de drogas, explosivos y la seguridad en operativos.
De acuerdo con el Departamento de Servicios Veterinarios de la PNP, la unidad tenía bajo su custodia 63 perros a finales de octubre. Sin embargo, el inventario realizado por la Contraloría reveló que solo había 35 perros en las instalaciones de la Policía Canina, lo que implica una desaparición de 28 animales.
Además de los perros desaparecidos, la auditoría encontró 15 canes que no pertenecían a la unidad. La presencia de estos animales ajenos a la institución ha generado aún más interrogantes sobre el manejo de la Policía Nacional de los recursos destinados a la Unidad Canina.