El exgerente general de Graña y Montero, Juan Manuel Lambarri, reveló ante el Segundo Juzgado Penal Colegiado Nacional un diálogo que complica la situación del expresidente Alejandro Toledo, quien enfrenta juicio oral por lavado de activos y colusión por presuntamente recibido más de 30 millones de dólares de Odebrecht a cambio de la licitación de los tramos 2 y 3 de la Carretera Interoceánica.
En el interrogatorio, Lambarri Hierro relató una discusión que protagonizó con el entonces nuevo gerente de proyecto y exjefe de Odebrecht en México, Luis Alberto de Meneses Weyll. El hecho ocurrió en setiembre de 2007, durante una sesión del directorio de Conirsa (consorcio integrado por GyM, JJC Contratistas Generales, ICCGSA y Odebrecht).
El exgerente de GyM comenta que le reclamó a Weyll por la transferencia de 100 millones de dólares del proyecto a la matriz de Odebrecht en Brasil. El brasileño respondió que el monto sería usado para cancelar deuda con Toledo Manrique.
“Había una discusión en esa reunión, básicamente, porque Odebrecht había tomado un dinero del consorcio y lo había llevado a su matriz en Brasil. Yo le dije: ‘Oye, ¿por qué haces eso? Tú no puedes disponer de la plata como te da la gana, etc, etc’. Y, bueno, el señor Luis Meneses Weyll en ese momento agarra y me dice: ‘No, pero nosotros tenemos que hacer pagos. Tenemos que pagarle al señor Toledo’. Eso me lo dijo claramente. ’Tenemos que pagarle al señor Toledo’. Yo me quedé absolutamente sorprendido (porque) el señor Toledo ya no era presidente del Perú hace algo más de un año. Yo mostré indignación y me retiré de la reunión”, declaró Lambarri.
El exgerente de Graña y Montero precisó que notificó del contenido de la conversación a su jefe directo, Mario Alvarado Pflucker, para que se los comunique a José Graña Miró-Quesada. Ello ya que consideraba que la afirmación, sobre un pago al exmandatario, tenía que investigarse.
La Fiscalía prosiguió con el interrogatorio y consultó a Juan Manuel Lambarri qué acciones se tomaron ante la revelación de Luis Weyll.
El testigo indicó que, luego del referido incidente, se creó el denominado “directorio senior” al cual ya no era invitado porque, según le confesó Fernando Camet, ahí se trataban “temas sensibles”.
Detalló que integraban el “directorio senior” Fernando Castillo Dibós, Fernando Camet, José Graña Miró-Quesada, Hernando Graña Acuña y, supone, Jorge Barata.
El abogado de Alejandro Toledo, Roberto Su, preguntó a Lambarri si la discusión fue consignada en el acta de la sesión de directorio. A lo que el ex GyM respondió que “para nada”, pero indicó que si se revisan las cuentas del 2007 de Conirsa encontrarán una salida de 100 millones de dólares a Brasil.