Boluarte Confronta Acusaciones y Asegura Conocer la Fuente del Escándalo Rolex
En un desarrollo reciente y controvertido dentro del panorama político, la presidenta Dina Boluarte ha tomado una posición firme frente a las acusaciones que la vinculan con un lujoso reloj Rolex, objeto central de una investigación que ha captado la atención mediática y pública. Acompañada por su gabinete de ministros, Boluarte emitió un comunicado dirigido a la nación, donde expresó su conocimiento sobre la identidad de quien estaría orquestando las acusaciones en su contra, insinuando un trasfondo político y personal en la situación.
La operación de allanamiento a su residencia, llevada a cabo en la noche del 29 de marzo en Surquillo, formó parte de las acciones de investigación vinculadas al denominado «caso Rolex». Este hecho marcó un punto de inflexión para la mandataria, quien, rodeada de sus colaboradores más cercanos, cuestionó la repentina atención de ciertos medios de comunicación hacia sus pertenencias personales, sugiriendo una campaña de desprestigio en su contra.
«¿Desde cuándo un sector de la prensa se fija en lo que usa o no una presidenta?», cuestionó Boluarte, reflejando su percepción de una crítica mediática sesgada y enfocada en aspectos superficiales. La presidenta enfatizó su distancia de cualquier acto de corrupción, desafiando a aquellos que han vendido la historia de los relojes a reconocer su integridad y compromiso con la transparencia.
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En un intento de desmontar las acusaciones de enriquecimiento ilícito, Boluarte ofreció un cálculo detallado de sus ingresos lícitos durante un periodo de siete años, buscando demostrar la legitimidad de su patrimonio frente a las insinuaciones de irregularidades financieras.
Por otro lado, Mateo Castañeda, abogado de Boluarte, aclaró la situación de los relojes encontrados durante el allanamiento, indicando que, aunque se documentó su existencia y se tomaron fotografías, no se procedió a la incautación de ningún ejemplar.
Anticipándose a futuras controversias, la presidenta advirtió sobre la preparación de un reportaje periodístico en su contra, basado supuestamente en información proporcionada por un exfuncionario de la DINI, buscando implicarla en acciones de encubrimiento hacia terceros.
Este episodio subraya no solo la tensa relación entre el ejecutivo y ciertos sectores de la prensa, sino también la complejidad del escenario político en el que Boluarte intenta navegar, marcado por acusaciones, investigaciones, y una constante lucha por mantener la legitimidad y confianza de la ciudadanía.
