Por Andiolo Zevallos
Un planeta en riesgo permanente. En el mundo existen 14,935 ojivas nucleares instaladas; Rusia tiene 7,000, Estados Unidos 6,800, China 260, Reino Unido 215, Pakistán 140, India 130, Israel 80; y Corea del Norte 20. Todas son destructivas, no son figuras decorativas.
Para muestra un botón; las pruebas y amenazas no han cesado desde el año 1945. Estados Unidos realizó 1,032 pruebas, Rusia 715, Francia 210, Reino Unido 45 China 45, India 3, Pakistán 2 y Corea del Norte 10. Solo las explosiones atómicas realizadas entre 1945 y 1980 equivalen a 34,000 bombas como la que devastó Hiroshima.
Washington tiene 6,800 y Pionyang 20; y así estarán las cosas cuando en mayo, se realice la cumbre presidencial. «Pienso que ellos quieren hacer la paz. Pienso que es tiempo», dijo Donald Trump. «Kim Jong-un habló sobre desnuclearización, no solo de congelamiento. También, que no habrá pruebas de misiles durante este periodo de tiempo. Se está haciendo un gran progreso, pero las sanciones se mantendrán hasta que se llegue a un acuerdo” finalizó.
Históricamente, Corea del Norte ha sido irreverente y agresivo, mientras aceleraba su producción nuclear, primero bajo el liderazgo de Kim Il-sung, fundador de la Corea comunista en 1948, luego con su hijo Kim Jong-il y finalmente su nieto, este último, Kim Jong-un; tres generaciones de hermetismo, dictadura y odio; para desarrollar armas de destrucción masiva y amenazar a la humanidad.
«Será mejor que Corea del Norte no amenace más a EE.UU. Se encontrarán con fuego y furia como el mundo no ha visto jamás»; «Un perro asustado ladra más fuerte. Definitivamente domesticaré con fuego al viejo senil estadounidense mentalmente desquiciado», fueron algunas de las mutuas expresiones hace poco, y hoy están a punto de conversar, aparentemente sin negociar.
Kim Jong-un y Donald Trump, son radicalmente diferentes. Kim fue preparado para heredar el poder y criado para ello. Trump, llegó sorpresivamente al gobierno, tras dejar una carrera de éxitos en los negocios y la televisión. En lo único que se parecen, es en el temperamento.
Mientras dure la cumbre, tendremos dos escenarios. EE.UU. seguirá con la presión militar y el cerco económico internacional; y por el lado de Corea del Norte, la amenaza latente de utilizar sus armas nucleares; aun cuando su pueblo demande una vida digna en la península.
En el mundo hay 14,935 ojivas nucleares. La ONU dice que «solo una bomba puede destruir una ciudad entera y causar la muerte a millones de personas; poner en peligro el medio natural y las vidas de las futuras generaciones».