Marcellus Williams y Travis Mullis, fueron ejecutados con la inyección letal. Uno de ellos, clamaba inocencia recibiendo el apoyo de diversos grupos de activistas.
El pasado martes veinticuatro de septiembre, dos hombres condenados a muerte, fueron ejecutados con inyección letal en Estados Unidos, uno de ellos, había defendido su inocencia y recibido el apoyo de grupos activistas de los derechos civiles.
Asimismo, Marcellus Williams, un afroestadounidense de cincuenta y cinco años de edad, fue sentenciado en el año 2001 en el estado de Misuri (centro), debido al asesinato ocurrido en el año 1998 de la periodista Felicia Gayle, quien fue acuchillada en su vivienda luego de un presunto hurto.
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Ante ello, el hombre quien fue condenado por robo con allanamiento de morada y atraco, fue declarado culpable luego del testimonio de un antiguo compañero de celda y una exnovia, pese a que no se halló su ADN en la escena del crimen.
Sin embargo, su ejecución fue suspendida en el año 2015 y también en el 2017, debido al descubrimiento de un ADN masculino en el cuchillo que no era el suyo. En tanto, el gobernados de aquel entonces, Eric Greitens, decretó una comisión investigadora, el cual fue desactivada por su sucesor, Michael Parson, en el año 2023.
Tras ello, la fiscalía local, inició un procedimiento a fin de anular su condena, sin embargo, el pasado lunes, de Tribunal Supremo de Misuri, sentenció que no detendría la ejecución. A pesar de los reclamos de diversos grupos de derechos civiles como NAACP e «Innocence Project«, el gobernador Parson no interrumpió la pena, alegando que «ningún jurado ni ningún tribunal ha encontrado nunca fundamento a la alegación de inocencia”.
