Atacantes emplearon 18 drones y misiles crucero de fabricación Iraní
El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, dijo este miércoles que los bombardeos que sufrieron las instalaciones de la refinería saudí más grande del mundo fue un «acto de guerra» que tiene «las huellas del ayatollah» Alí Jamenei, guía supremo de Irán, al mismo tiempo que Arabia Saudí presentó pruebas de que los atacantes emplearon 18 naves no tripuladas y 7 misiles crucero de fabricación iranío.
Pompeo fue recibido en la ciudad costera de Yeda por el ministro de Exteriores saudí, Ibrahim al Asaf, y está previsto que se reúna con las máximas autoridades del reino para abordar los ataques, afectaron al precio del petróleo en los mercados mundiales y han tensado aún más la situación en el golfo Pérsico.
En declaraciones a la prensa transmitidas por a prensa que viaja con él, Pompeo dijo que el golpe múltiple contra las instalaciones de Aramco fue un «ataque iraní» y «no vino de los hutíes», como aseguraron los rebeldes chiítas del Yemen desde el primer momento.
Según Pompeo, nadie puede «absolver de responsabilidad» a los iraníes después de haber interrumpido el 5 % del suministro energético del mundo.
De otro lado, un vocero militar del Ministerio de Defensa de Arabia Saudita mostró este miércoles pruebas materiales de que, los ataques del sábado contra las instalaciones petrolíferas de Aramco fueron efectuados con 18 drones y 7 misiles de crucero iraníes.
El militar reiteró que «el ataque fue lanzado desde el norte e incuestionablemente fue responsabilidad de Irán».
Horas antes de las declaraciones de Pompeo, el presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció por Twitter que ha instruido al secretario del Tesoro para que incremente sustancialmente las sanciones» contra Irán, sin precisar el alcance y objetivo de esas medidas.