La iniciativa sigue el modelo implementado previamente en otros sectores
El Congreso de la República del Perú ha dado un paso significativo al aprobar en primera votación un dictamen que propone reducir la tasa del Impuesto General a las Ventas (IGV) para las peluquerías y salones de belleza. Con 74 votos a favor, 33 en contra y 9 abstenciones, la medida busca fomentar la formalización y reactivación económica de este sector crucial para la economía local.
El dictamen aún debe pasar por una segunda votación antes de ser enviado al Ejecutivo para su promulgación. Según lo dispuesto, las peluquerías y establecimientos dedicados a tratamientos de belleza pagarán solo un 8% de IGV, en lugar de la tasa general que se aplica a otras actividades económicas.
La propuesta incluye requisitos específicos para acceder a este beneficio fiscal. Las empresas del sector deberán inscribirse en la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) bajo el código correspondiente de la Clasificación Industrial Internacional Uniforme (CIIU). Esta medida tiene como objetivo no solo reducir la carga tributaria sobre estos negocios, sino también incentivar su formalización, lo cual contribuiría a una mayor recaudación fiscal a largo plazo.
La iniciativa sigue el modelo implementado previamente en otros sectores, como hoteles, alojamientos y restaurantes, que vieron una reducción similar de la tasa de IGV del 18% al 8%. Esta estrategia ha demostrado ser efectiva para estimular la actividad económica y generar empleo formal en áreas que tradicionalmente han enfrentado desafíos de informalidad.
Durante el debate parlamentario, el presidente de la Comisión de Economía, César Revilla del partido Fuerza Popular, destacó que la medida busca no solo beneficiar a los empresarios del rubro de belleza, sino también mejorar la recaudación tributaria del país. La formalización de estas actividades económicas no solo promueve un entorno de competencia justa, sino que también facilita el acceso a servicios financieros y protege los derechos laborales de los trabajadores del sector.
Es importante destacar que esta medida fiscal está alineada con los esfuerzos del gobierno peruano para promover la recuperación económica post-pandemia. La pandemia de COVID-19 ha golpeado duramente a sectores como el de servicios personales, incluidas las peluquerías, que han enfrentado desafíos significativos para mantenerse operativas y cumplir con las obligaciones fiscales.
La aprobación en primera votación del proyecto de ley que reduce el IGV para peluquerías y salones de belleza representa un paso positivo hacia la formalización y reactivación económica de un sector esencial para la economía peruana. La segunda votación y la posterior promulgación por el Ejecutivo serán pasos cruciales para consolidar esta medida y materializar los beneficios esperados para empresarios y consumidores por igual.