El papa Francisco respalda la bendición de parejas del mismo sexo y en «situación irregular», descartando la posibilidad de renunciar
Ayer, el papa Francisco respaldó su elección de autorizar la bendición de parejas del mismo sexo o en «situación irregular», generando desconfianza entre los conservadores de la Iglesia. También afirmó que no tiene planes de renunciar, reafirmando su compromiso con la apertura y comprensión en la Iglesia Católica.
“No es ni un pensamiento, ni una preocupación, ni un deseo, es una posibilidad abierta a todos los papas, pero por el momento no está en el centro de mis pensamientos, inquietudes o sentimientos”, dijo en una entrevista para el programa Che tempo che fa, al ser preguntado sobre una posible renuncia, el papa Francisco expresó que no considera esa opción, a diferencia de su predecesor, Benedicto XVI.
Y agregó: “Mientras yo me sienta con capacidad de servir, seguiré adelante; cuando no pueda más, será el momento de pensarlo”.
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La bendición del Vaticano a parejas del mismo sexo sin equipararlas al matrimonio
La propuesta del Vaticano de bendición a parejas del mismo sexo, sin compararlas con el matrimonio, es considerada por algunos analistas como un «significativo avance», aunque provoca divisiones en la Iglesia y es percibida como «insuficiente» por muchos defensores de los derechos LGBT+.
El Vaticano ha aceptado la «posibilidad de bendecir» a parejas «en situación irregular» o del mismo sexo sin compararlas con el matrimonio, evitando un ritual específico o la entrega de bendiciones a personas vestidas como en una boda.
La Congregación para la Doctrina de la Fe, después de 23 años, publicó una ‘Declaración’ titulada ‘Fiducia Supplicans’ el lunes para abordar la polémica en torno a la bendición de parejas «irregulares».
Un cambio doctrinal
Este cambio representa un giro con respecto al documento de marzo de 2021, emitido por la Congregación y liderada en ese momento por Luis Ladaria Ferrer, donde se argumentaba que la Iglesia católica no podía brindar su bendición a las uniones de personas del mismo sexo.
En su contenido de nueve páginas, la reciente declaración examina el origen y el significado teológico de la bendición, rastreándolo desde el Antiguo Testamento hasta el resto de las Escrituras.
En la Iglesia de Francisco, la bendición se interpreta como un acto de «inclusión» o de brindar «consuelo, atención y aliento».
Sin rituales
A pesar de la apertura a la bendición de estas parejas, el Vaticano aclara que esta acción no debe confundirse en ningún caso con la institución del matrimonio, que define como «la unión exclusiva, estable e indisoluble entre un varón y una mujer, naturalmente abierta a engendrar hijos».
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