Antoine Griezmann pasó de héroe a villano. Su doblete igualó el 0-2 inicial de los ‘red’ pero una desafortunada acción con Firmino le costó la roja
En la previa del partido, el técnico del Atlético de Madrid conformó su ataque con Lemar (Suárez, 80′), Carrasco; Griezmann y Joao Félix. Asimismo, Diego Simeone formó su mediocampo con Trippier, De Paul (Lodi, 80′) y Koke. En cambio, el entrenador del Liverpool decidió atacar con Salah (N. Williams, 92′), Firmino y Mané.
En la primera parte, Mohamed Salah se inventó un eslalon en el que dejó atrás a Carrasco, Lemar y Koke. Su posterior disparo lo desvió Milner hacia dentro. La UEFA le dio el tanto al egipcio. Después, el Atleti encajó el segundo mazazo. Mal despeje de Felipe y Keïta empalmó una volea desde la frontal directo a la red. El Liverpool tenía maniatado a su rival con una posesión del 80%.
En un córner en corto, Lemar hizo diabluras besando la línea de cal y la puso para Koke, que la metió con toda la intención en el área donde Griezmann se apuntó el gol. Luego, el ‘Principito’ malogró un uno contra ante Alisson pero se resarció con un gol de bella factura. Joao Félix jugó con Keïta y asistió al francés, cuyo control orientado fue medio gol.
En la segunda parte, el meta Alisson negó un nuevo tanto a Carrasco justo antes de que llegara la desafortunada expulsión del ‘Principito’ Griezmann. El exazulgrana levantó la pierna para controlar un balón llovido sin ver que Firmino andaba por las inmediaciones. Bota en la cara y roja directa.
Por último, el Atleti sufrió porque Hermoso cometió un penalti infantil sobre Jota y Salah lo marcó. El árbitro pitaba penalti y lo llamó el VAR, pasó por la tele y rectificó. El contacto demasiado leve le pareció. Murió el Atleti a pesar del derroche. En pie, pero murió. Tocará dar la talla en Anfield.