El delantero Jamie Vardy marcó de penalti y forzó el gol en propia de Alderweireld para colocar al Leicester a la segunda plaza.
En la previa del partido, el técnico del Leicester conformó su ataque con Maddison, Barnes y Jamie Vardy. Además, Brendan Rodgers formó su mediocampo con Tielemans, Ndidi y Albrighton. En cambio, el entrenador del Tottenham decidió atacar con Ndombele (Bale, 46), Lo Celso y Kane.
En la primera parte, Kane y Son tuvieron pocas oportunidades en el partido. Un partido igualado, en el que Jamie parecía ser un fastidio para Dier y Alderweireld, pero nada más que eso. Sin embargo, el VAR llamó la atención al colegiado por un absurdo derribo de Aurier a Fofana resultó penalti. Vardy no perdonó y el mazazo previo paso a ir a los vestuarios dejó KO a los de Mou.
En la segunda parte, Vardy afilaba los dientes y así llegó el segundo. No fue obra del inglés, pero sí que lo propició con un cabezazo que Alderweireld se metió en en la meta de Lloris. Luego, el Tottenham buscó el desequilibrio con Son, Lucas y Kane, pero que no obtuvo jugo de sus pocas llegadas. Por ello, Harry probó con un par de disparos de media distancia bien resueltos por Schmeichel.
Por último, el portero del Leicester sacó una brillante parada a Son en un remate no muy acertado en el segundo palo. Se complica el equipo de Mourinho, pero lejos de hablar de una posible crisis. Es cuarto todavía y tiene a solo 6 puntos al líder Liverpool de Klopp. Paso atrás del Tottenham si sus aspiraciones ligueras iban de verdad. La Premier League va a ser muy larga.