Las gafas inteligentes pueden alcanzar a sustituir al celular, lo que implicaría un cambio en el actual panorama de los videojuegos.
Los tiempos cambian y, hoy, las consolas y las computadoras ya no reinan en el mundo de los videojuegos. Han dejado paso al dispositivo estrella, el celular, que aporta más de la mitad de los ingresos del sector. Este fenómeno tiene muchas razones de ser; por un lado, estos aparatos (así como las redes de datos) son mucho más avanzados; por otro, se trata de un dispositivo que todo el mundo lleva consigo y utiliza de forma constante; además, no tiene las limitaciones, en lo que a segmentos de edad se refiere, que otros “gadgets”.
Por estos y otros motivos, el celular ya es el acceso principal de los Gamers a su afición. ¿Se podía predecir? Tal vez. Pero ahora que es una realidad, las desarrolladoras centran una parte importante de sus esfuerzos en crear nuevos productos para este formato o adaptar los existentes al entorno móvil. Por eso, resulta de un gran interés poder anticiparse y descubrir si otros dispositivos, a corto o medio plazo, podrían tomar el relevo en la industria de los videojuegos. Claro está que no va a ser fácil desbancar al celular, que actualmente tiene un gran impacto en la vida diaria de los consumidores.
Y no sólo ocurre con los videojuegos, también el iGaming tiene al celular como el dispositivo más utilizado; es por ello que, en la actualidad, los juegos de tragamonedas gratis están perfectamente optimizados para este aparato; en caso de no ser así, las empresas de este marcado perderían una importante cuota de clientes potenciales. Por tanto, tanto el Gaming como el iGaming están atentos a cualquier novedad que les de alguna pista de por dónde evolucionará el sector y las costumbres de su público.
Probablemente, una noticia reciente les ha resultado de gran interés. Y es que Mark Zuckerberg, el gran jefe de Meta (antiguo Facebook), hizo unas declaraciones que podían cambiar la percepción de los consumidores en lo que respecta al dispositivo de referencia para su día a día. Recordemos que lo que más utilice la sociedad en general es, probablemente, lo que triunfará como entorno para los videojuegos. Zuckerberg afirmó que, si existe un aparato capaz de destronar al celular, éste serán las gafas inteligentes.
Pero, ¿qué entendemos por gafas inteligentes? Pues no dejan de ser un tipo de producto que incorpora, en alguna medida, la tecnología. Actualmente, encontramos algunas disponibles en el mercado (de hecho, Meta las ha comercializado); pero su funcionalidad se limita a añadir micrófono, cámara y poder crear elementos multimedia. Sin embargo, se están desarrollando otras con capacidad para la Realidad Aumentada; es decir, que podrán dar información digital de lo que nos rodea y, por tanto, incorporar elementos tecnológicos a lo que vemos.
Y aquí es donde la cosa se pone interesante. Hasta tal punto que Zuckerberg considera que, con este gadget en nuestras manos, el móvil apenas saldrá del bolsillo en todo el día. Comunicarse, informarse, analizar lo que tenemos alrededor y, por supuesto, jugar. Esos son algunos de los principales usos que podrían absorber las Smart Glasses. ¿Jugar? Pues sí. Y el precedente más inmediato lo tenemos con un popular producto: el Pokèmon GO! Este juego para celular combinaba la realidad con una actividad lúdica: la de atrapar Pokèmons, que se convirtió en viral.
El futuro puede ser aún más apasionante, teniendo en cuenta que estas gafas se utilizarían durante todo el día, activando su funcionalidad con sólo una orden verbal o presionando un botón. Además, los nuevos modelos son considerablemente ergonómicos (ligeros y muy parecidos a las gafas convencionales). Pero, ¿tan accesible resulta como para no tener que utilizar el celular? Eso es difícil de imaginar, lo cual no significa que no sea viable. Tal vez, pese a lo que diga el dueño de Meta, a la sociedad le acabe resultando algo abrumador el hecho de depender tanto de sus lentes.
Pero, por otra parte, si el Metaverso acaba convirtiéndose en operativo, la sinergia entre Realidad Aumentada y Realidad Virtual puede convertirse en el entorno digital por excelencia; lo cual, acabaría por señalar el futuro de los videojuegos. Demasiadas incógnitas y un medio plazo por definir. De momento, sólo son conjeturas. Pero este mercado sigue siendo demasiado jugoso como para no divagar sobre él.
