El Instituto de Medicina Tradicional llevó a cabo más de 1.500 investigaciones sobre plantas autóctonas que poseen propiedades curativas
Durante 31 años, el Instituto de Medicina Tradicional (IMET) de EsSalud ha investigado las propiedades de varias plantas medicinales. Estas investigaciones ya están demostrando su eficacia al reducir los síntomas de afecciones crónicas, como la diabetes y el glaucoma, sin necesidad de recurrir a tratamientos farmacológicos.
Según las estadísticas oficiales del área de Medicina Complementaria de EsSalud, aproximadamente el 70% de los fármacos actualmente disponibles en el mercado farmacéutico han sido formulados a partir de componentes químicos que se encuentran en plantas medicinales, basados en conocimientos de uso ancestral.
El director del IMET, José Aranda Ventura, detalló que la labor de este laboratorio natural, situado en Loreto, se centra en analizar las cualidades curativas de las plantas provenientes de la selva amazónica peruana. Gracias a la validación científica de sus expertos, estas pueden ser empleadas en el tratamiento de una amplia gama de enfermedades, con resultados notables y evidentes.
“A lo largo de la historia del Instituto de Medicina Tradicional, se habrán realizado mil o mil quinientas investigaciones y la ciencia avanza así, ensayo y error, para desarrollar nuevas propuestas terapéuticas», expresó la máxima autoridad del IMET.
Se explicó que se están analizando distintas cantidades, extractos y combinaciones de plantas, siempre considerando la información derivada de su uso ancestral y siguiendo los protocolos que aseguran la correcta identificación y origen de la planta medicinal.
«Nos enfocamos en respaldar científicamente el efecto farmacológico de estas plantas medicinales», puntualizó.
Poder curativo y patentes
El IMET dispone de un equipo multidisciplinario compuesto por expertos que llevan a cabo investigaciones en distintas áreas, incluyendo Etnobotánica, Taxonomía, Agrotécnia, Química, Biología y Medicina.
Estos expertos colaboran de manera coordinada y han dedicado décadas al estudio de las más de 500 especies que residen en el renombrado jardín botánico de la institución.
Uno de sus productos destacados lleva el nombre de DERMOIMET®. Esta pomada, elaborada a partir de aceites vegetales de la región, contiene vitaminas liposolubles y un perfil óptimo de Omega 3, 6 y 9, lo que le confiere un potencial curativo para diversas enfermedades dermatológicas como psoriasis, dermatitis, úlceras en pie diabético, heridas y quemaduras por fricción.
“El expediente de los estudios de este producto fue evaluado por Indecopi, quien declaró que es materia patentable, así que estamos en trámite para poder hacer el primer registro de patente de invención desde que existe EsSalud” sostuvo el Aranda.
Además, están llevando a cabo investigaciones sobre otro producto dirigido a combatir la Diabetes tipo 2. Este se presenta en un sachet que contiene una combinación de especies con un elevado porcentaje de fenoles totales que, según los estudios científicos, poseen propiedades hipoglucemiantes. Los testimonios de los pacientes son la evidencia de su eficacia.
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“Cuando me diagnosticaron la enfermedad, mis niveles de azúcar estaban al borde del coma diabético y me recomendaron venir con el doctor Aranda al IMET, quien me recomendó un plan de alimentación saludable y el consumo de este sachet, que ayuda a disminuir la glucosa. Es un polvito para tomarlo diariamente como agua de tiempo. Desde hace dos años mis niveles de glucosa no se alteran y me siento mucho mejor”, subrayó la paciente.
Caso inédito
A la edad de tan solo 13 años, a Daniel Ríos le diagnosticaron Leucemia Linfoblástica. Viajó desde Iquitos a Lima para comenzar su tratamiento de quimioterapia, pero con el tiempo, en lugar de mejorar, la enfermedad persistió.
Después de consultar a numerosos especialistas, Daniel y su madre llegaron al IMET. Después de obtener el consentimiento informado de sus padres, inició un riguroso tratamiento destinado a mejorar su calidad de vida, que incluía el uso de plantas con posibles propiedades anticancerígenas.
Diez años más tarde, Daniel nos comparte que, gracias al plan de tratamiento proporcionado y supervisado por el IMET, su enfermedad está en completa remisión, lo que significa que en la actualidad no se detecta presencia de cáncer en su sangre.
“Cuando llegué al IMET el Dr. Aranda me ofreció que me ayudaría a mejorar mi calidad de vida, pero nuestra sorpresa ha sido grande al ver que tantos años después, mi enfermedad ha entrado en remisión”, indicó el paciente que hoy ha logrado hacer una vida normal y hasta tener su propia familia.
Logros del IMET a nivel nacional
El IMET ha tenido el honor de recibir el premio Kaelin en tres ocasiones, el cual es el más alto reconocimiento en ciencias de la salud organizado anualmente por EsSalud: En el año 2007, se evaluó el efecto citotóxico de 5 especies vegetales. En 2011, se llevó a cabo un estudio clínico piloto sobre el aceite sacha inchi, destinado a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos. Finalmente, en 2013, se consolidaron investigaciones para desarrollar un producto para combatir la diabetes.
Asimismo, en 2011, el IMET recibió el Premio a la Excelencia Laboral «Mérito Extraordinario», otorgado por EsSalud. En los años 2015 y 2021, obtuvieron financiamiento del Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondecyt) en colaboración con otras instituciones.
El IMET opera como un órgano descentralizado bajo la supervisión de la Gerencia de Medicina Complementaria y ha contribuido a que esta entidad sea designada como Centro Colaborador de la OMS para la Medicina Tradicional y Complementaria en las Américas.
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