En un lapso de menos de 12 horas, al menos siete personas perdieron la vida a manos de sicarios en distintos distritos de Lima, muchos de los cuales están bajo estado de emergencia.
Ante el aumento de la violencia en el Callao, donde cinco personas fueron asesinadas por sicarios en diferentes puntos del distrito, la Defensoría del Pueblo ha solicitado al Ejecutivo tomar medidas más efectivas.
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Aunque el gobierno de Dina Boluarte declaró el estado de emergencia para combatir la criminalidad, los asesinatos por encargo y las extorsiones continúan. El ministro del Interior y el jefe de la Región Policial Lima indicaron que los resultados no serán inmediatos, pero la inseguridad persiste, especialmente en distritos como Ate, El Callao, San Juan de Lurigancho y Puente Piedra, donde usar el transporte público se ha vuelto una actividad de alto riesgo.
Crimen en El Callao
Uno de los asesinatos ocurrió en El Callao, donde Daniel Rojas Palacios, un mototaxista de 31 años, fue víctima de un ataque por encargo. El crimen sucedió en la urbanización Santa Rosa, frente a la parroquia Juan XXIII, en el parque Las Rosas. Rojas, quien había acudido al lugar para jugar fútbol, recibió una llamada y al atenderla fue abordado por un sicario que le disparó a quemarropa. A pesar de las súplicas de la víctima, el atacante lo acribilló y huyó en una moto lineal. Las autoridades investigan el caso como un posible ajuste de cuentas, mientras que la familia de Rojas, quien deja dos hijos huérfanos, pide justicia.
Violencia en San Juan de Lurigancho
En San Juan de Lurigancho, otro distrito bajo estado de emergencia, un joven fue asesinado en la madrugada del 8 de octubre. El ataque ocurrió frente a la institución educativa Juan Velasco Alvarado, donde la víctima fue interceptada por dos sujetos en una moto lineal que le dispararon cinco veces. A pesar de ser trasladado al hospital de Canto Grande, el joven no sobrevivió. Este hecho pone en evidencia la grave crisis de seguridad que enfrenta el país.
Extorsiones en Puente Piedra
En Puente Piedra, la organización criminal «Los Elegantes del Norte» ha sembrado el miedo entre los empleados de la empresa de transportes ‘Ramón Castilla’. Tras recibir un mensaje de extorsión el 1 de octubre, los trabajadores se vieron obligados a detener sus operaciones. Los criminales exigen S/. 5000 para permitirles operar sin sufrir ataques. A pesar de los esfuerzos de los empleados por reunir el dinero, los dueños de la empresa no solo se negaron a pagar, sino que obligaron a los trabajadores a firmar un documento eximiendo a la empresa de responsabilidad en caso de ser atacados durante sus labores.
