Un llamado de paz y tranquilidad es lo que solicita el expresidente de Bolivia, Evo Morales luego de instar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) frenar la «masacre que se viene realizando en el país de los hermanos indígenas», quienes protestan contra el gobierno interino.
Luego que Morales renunció a su cargo como mandatario del Estado Boliviano y posterior a ello viajara a Ciudad de México donde recibió asilo político, la senadora opositora al gobierno Jeanine Añez fue proclamada como presidenta interina valiéndose de lo establecido en los procedimientos de la Constitución boliviana, sin embargo aún así las protestas en las calles continuaron.
Cientos de bolivianos se han atrincherado en las calles continuando con los disturbios los cuales hasta el momento han dejado como saldo de la masacre a 27 personas fallecidas, según datos brindados por la AFP.
«La dictadura de Áñez, (el líder opositor Luis Fernando) Camacho y (el excandidato presidencial Carlos) Mesa ya ha provocado 30 muertes y decenas de heridos con represión de la Policía y FFAA», escribió Evo Morales en su cuenta de Twitter.
«Hago un llamado a la CIDH y a la ONU a denunciar y frenar esta masacre de hermanos indígenas que piden paz, democracia y respeto a la vida en las calles», agregó el exmandatario.