Cathy Barriga, exalcaldesa de Maipú, ahora ofrece contenido en la plataforma Onfayer mientras cumple arresto domiciliario.
Cathy Barriga, exalcaldesa de la comuna de Maipú, Chile, vuelve a ser noticia, pero esta vez por su incursión en el mundo del contenido erótico en la plataforma Onfayer. La exmodelo, quien enfrenta un proceso judicial bajo arresto domiciliario, es acusada de haber malversado USD 33 millones durante su gestión al frente del municipio. A pesar del escándalo, Barriga ha encontrado una nueva forma de mantenerse en el centro de atención.
Barriga, conocida por su pasado en programas de televisión y su carrera como alcaldesa, lanzó su perfil en Onfayer, donde ofrece contenido exclusivo para adultos. A través de sus redes sociales, la exfuncionaria invitó a sus seguidores a descubrir «su lado más travieso» en la plataforma, donde algunas de sus imágenes están disponibles de manera gratuita, mientras que el acceso completo a su contenido tiene un costo mensual de USD 25.
La noticia ha causado revuelo tanto en medios de comunicación como en redes sociales, donde Barriga, de 51 años, defendió su decisión de ingresar a este nuevo ámbito. “Lo adverso me ha hecho más fuerte”, señaló en uno de sus mensajes. En sus publicaciones, la exalcaldesa adoptó un tono filosófico, mencionando que el proceso judicial que enfrenta le ha permitido reflexionar sobre su vida y su capacidad para superar adversidades.
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La plataforma Onfayer, especializada en contenido para adultos, le dio la bienvenida a Barriga, confiando en que su perfil atraerá una gran cantidad de seguidores. Mientras tanto, la exalcaldesa sigue enfrentando acusaciones que incluyen la falsificación de informes financieros y la compra irregular de collares Swarovski durante su mandato, entre otros cargos. Las autoridades han señalado que las pruebas en su contra son contundentes, lo que podría llevarla a enfrentar penas severas.
El caso de Cathy Barriga sigue siendo uno de los más mediáticos en Chile, no solo por la magnitud de las acusaciones de corrupción, sino también por la constante polémica que ha rodeado su figura pública. Mientras se espera el avance de su proceso judicial, su incursión en el contenido erótico ha generado nuevas interrogantes sobre el impacto de la exposición mediática en figuras políticas
