Ricardo Sánchez Serra
La colonia argentina en Lima celebró en grande el triunfo de su país en Catar 2022, cumpliéndose la cábala del embajador Enrique Vaca-Narvaja de contratar una pantalla gigante, lucir la misma camiseta albiceleste y convocar a los mismos invitados que fueron vestidos de la misma forma en todos los partidos.
La alegría fue muy grande y el sufrimiento también, pues el seleccionado argentino estuvo jugando mejor que el equipo francés y siempre estuvo adelante en el marcador. La hinchada alentó en todo momento con numerosos cánticos, el orgullo de ser argentinos y sudamericanos y evocar al astro mundial Lionel Messi sin cansancio.
Acompañaron al embajador Vaca-Narvaja, sus colegas de Marruecos, Amín Chaoudri; Lisa D. Kenna, de Estados Unidos; Carlos Aparicio Vedia, de Bolivia; Galo Yépez, de Ecuador, Alejandro Arias, de República Dominicana y Maree Ringland, de Australia, y el cónsul de Chile en Arequipa, Paúl Díaz, además de otros diplomáticos, que vivaron en forma persistente al seleccionado conducido por Messi.
El júbilo y las lágrimas se hicieron presentes cuando, en épica definición de penales, Gonzalo Montiel define con magistral ejecución. Argentina campeón del mundo por tercera vez, luego de 36 años.