Cuatro incendios forestales han sido controlados en Áncash y Cusco, mientras que eventos similares continúan afectando a Piura, Huancavelica, Puno y San Martín.
En los últimos días, se lograron extinguir cuatro incendios forestales en los distritos de Cajay, Llamellín y Casca, en Áncash, y en Pallpata, en Cusco. Estos siniestros, que ocurrieron entre el 10 y 12 de septiembre, fueron controlados gracias a la intervención de las autoridades locales y la colaboración de la comunidad. Sin embargo, en el caso de Llamellín, las condiciones climáticas fueron clave para detener el avance del fuego, según informó el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN), perteneciente al Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
Afortunadamente, estos incendios no causaron daños a las personas, aunque destruyeron 42.5 hectáreas de vegetación. Las evaluaciones de daños, realizadas por los municipios locales, confirman que las emergencias en estas zonas están bajo control.
Lee también:
Incendio forestal pone en peligro el área de conservación Corosha y sus especies vulnerables
Incendios controlados en otras regiones
Además, se ha logrado controlar tres incendios más en los distritos de Vischongos (Ayacucho), Lamud (Amazonas) y Pampas de Hospital (Tumbes), que comenzaron entre el 1 y 10 de septiembre. En estos lugares, la intervención de bomberos, personal del Ejército, brigadistas del Sernanp y los pobladores organizados fue crucial para frenar los incendios.
En Vischongos, las llamas dejaron un saldo devastador: 80 hectáreas de vegetación destruida, 15 viviendas inhabitables, una persona fallecida y decenas de damnificados. En Lamud, se perdieron 8,900 hectáreas de cobertura natural, además de 100 hectáreas de cultivos y dos establecimientos. Pampas de Hospital reportó la destrucción de 350 hectáreas de vegetación.
Emergencias en curso
A pesar de estos avances, cinco incendios siguen activos en diversas regiones. En Limbani (Puno), Huarmaca (Piura) y Pichos (Huancavelica), iniciados el 13 de septiembre, y en Juanjuí (San Martín) y Pomabamba (Áncash), que comenzaron entre el 10 y 12 de septiembre. Hasta el momento, se han registrado 238 hectáreas de cobertura vegetal destruida y una hectárea de cultivos arrasada.
Las labores de extinción continúan, con la participación de autoridades locales, personal policial y el Ejército. Indeci y el COEN siguen monitoreando estas emergencias en coordinación con los centros de operaciones regionales y municipales.