Apenas dos minutos después del despegue, uno de los motores del Soyuz falló y obligó a los dos tripulantes a regresar urgentemente a la Tierra
El astronauta estadounidense Nick Hague y el cosmonauta ruso Alexéi Ovichinin regresaron indemnes a tierra este jueves en Kazajistán después de que su nave tuviera un problema en el motor cuando iba camino de la Estación Espacial Internacional (ISS).
Apenas dos minutos después del despegue, uno de los motores del Soyuz falló y obligó a los dos tripulantes a regresar urgentemente a la Tierra en vez de continuar su viaje hasta la ISS.
«En el momento del despegue de la nave Soyuz MS-10, sucedió algo inusual. Los sistemas de emergencia se activaron, la nave aterrizó en Kazajistán. La tripulación está viva y se estableció el contacto», anunció la agencia espacial rusa Roskosmos en un comunicado.
«Los recuperamos», agregó poco después una fuente de Roskosmos a los periodistas presentes en el cosmódromo ruso de Baikonur, en Kazajistán.