Por: Germán Lench Cáceres / Ante el desamparo del consumidor en el mercado farmacéutico el Estado debería intervenir para que estos medicamentos genéricos o esenciales estén a disposición del consumidor, ya que estos tienen precios más baratos que los de marca y son seguros en su calidad.
El artículo 58º de la Constitución, establece que la iniciativa privada es libre. Se ejerce en una economía social de mercado; el Estado interviene cuando sea necesario bajo un régimen de competencia justa. Bajo este régimen el Estado actúa en el área de promoción de la salud.
El artículo 61° señala que el Estado facilita y vigila la libre competencia. Combate toda práctica que la limite y el abuso de posiciones dominantes o monopólicas.
Por ejemplo, un solo dueño tiene un alto porcentaje del mercado de farmacias y boticas. Intercorp se ha fusionado y adquirido cadenas (Inka farma, Mi Farma, Boticas BTL, Boticas Fasa, Boticas Arcángel), los laboratorios fabricantes Quilab y Cifarma, las droguerías distribuidoras Química Suiza y Albis y puede fijar precios y determinar qué productos elaboran sus laboratorios para sus establecimientos.
El Ministerio de Salud debe garantizar la compra y venta de los medicamentos genéricos asegurando que se encuentren a precios cómodos y que tengan un stock en la lista de medicamentos básicos. Estos deben ser comercializados en los Hospitales del MINSA en los de ESSALUD de las Fuerzas Armadas y Policiales, para una mayor oferta a los pacientes que padecen distintas enfermedades.
El Gobierno debe priorizar la salud de la gente y proponer leyes para defenderla. Sin embargo, como no tenemos una verdadera ley para controlar los oligopolios, el Estado no actúa.
“En las farmacias privadas encontramos medicamentos de marca que son más rentables, pero no medicamentos genéricos”. Por tanto, se debe regular el mercado de medicamentos esenciales para que exista una oferta a precios cómodos.
Los monopolios hacen uso de su posición de dominio para vender caro y dejar de vender productos genéricos baratos, nos preguntamos ¿Qué hace INDECOPI en defensa del consumidor, institución que debería sancionar a las empresas abusivas y especuladoras?
Debe promoverse mayor competencia para reducir la diferencia entre los productos de marca y los genéricos. Para alcanzar este objetivo, se debe mejorar la vigilancia de los medicamentos y combatir su falsificación; ya que estas prácticas atentan contra la oferta y el consumo de los medicamentos genéricos, pues no cuentan con una marca que los respalde surgiendo la especulación.
El Gobierno debe adoptar acciones para obligar a que las farmacias vendan medicamentos genéricos y así reducir los precios de estas medicinas.
Muchos países tienen normas que evitan que el mercado se monopolice, ¿Y el Perú?, somos un caso extremo donde los ultra fundamentalistas han impuesto una manera pro empresa de ver el mundo y no una manera promercado.
Nuestro marco regulatorio es ligero para la importancia que tiene la salud. Esta ligereza genera problemas en el consumidor y en el mediano plazo ocasiona una segmentación del mercado a favor de los medicamentos de marca en contra de los genéricos que se caracterizan por ser más baratos, posibilitando satisfacer una necesidad básica del consumidor.
(*) Economista
