El ataque terrorista ocurrió en el kibbutz Kfar Aza
Las Fuerzas de Defensa de Israel guiaron a la prensa extranjera el martes hasta el kibutz Kfar Aza, una de las zonas más golpeadas por el ataque terrorista perpetrado por los militantes de Hamás en suelo israelí. Este ataque se llevó a cabo desde la Franja de Gaza el pasado sábado.
En el suelo del kibutz se encontraron los cuerpos de residentes israelíes y atacantes abatidos, rodeados de casas quemadas, mobiliario disperso y vehículos incendiados. Mientras tanto, los soldados israelíes recorrieron las viviendas para recuperar los cuerpos sin vida.
«Ves a los bebés, a las madres, a los padres, en sus dormitorios, en salas donde trataron de ponerse a resguardo y cómo los terroristas los mataron. No es una guerra, no es un campo de batalla. Es una masacre, es una actividad terrorista», describe el general israelí Itai Veruv.
Las imágenes de los bebés decapitados afectaron a los reporteros que llegaron hasta el lugar para recopilar información acerca de este atentado tan terrible.
«Los bárbaros de Hamas masacraron a 40 bebés durante los ataques del 7 de octubre. Israel honrará a cada una de las víctimas de estos atroces ataques terroristas islamistas. No nos detendremos ante nada para hacer que estos terroristas paguen un alto precio», tuiteaba la Embajada de Israel en Francia en la red social X (Twitter hasta el mes pasado).
Por su parte el ex embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, aseguró que entre los terroristas no sólo había militantes de Hamas: «No sólo miembros de Hamas, más gente gazatí se infiltró en Israel y cometió todo tipo de atrocidades».
Un representante militar informó que el saldo de víctimas a causa de los ataques de Hamás se había elevado a 900 personas, en su mayoría civiles que perdieron la vida a tiros en sus residencias, en las vías públicas o incluso durante un evento musical, superando en magnitud cualquier ataque previo perpetrado por grupos islamistas desde los eventos del 11 de septiembre en Estados Unidos.
Además, un número considerable de ciudadanos israelíes fueron secuestrados y exhibidos en las calles como botón de guerra.
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Desde entonces, según las autoridades, al menos 770 residentes de Gaza han perdido la vida debido a ataques israelíes, y extensas áreas han sido devastadas.
En lo que respecto al kibutz Kfar Aza, las estadísticas de víctimas indican que alrededor del 30% de su población, aproximadamente 200 de los 765 habitantes fueron víctimas de ataques por parte de terroristas.
