Hace unos días, el gobierno israelí declaró, ante el “run-run” de que los gazatíes (los ciudadanos de la Franja de Gaza) iban a hacer manifestaciones en las fronteras, en víspera de la Festividad de Pésaj, (la Pascua), que quien se propasara con armas en esa manifestación, sería un objetivo militar.
¿Por qué los dirigentes de Hamás, organizaron esa operación para esa fecha? Respuesta: Primero, porque los israelíes de espiritualidad judía celebran esa festividad y había que amargarle la vida al pueblo judío israelí. Segundo, porque Hamás, le gana la *batalla de la media* a Israel, en la prensa hablada y escrita, más Facebook, WhatsApp, Twitter, etc…
Los de Hamas siempre se sienten las víctimas y hasta colocan a sus hijos y mujeres como carne de cañón. Perdón: a los hijos de los gazatíes, porque los de ellos están en el exterior!
¡Pero hay de Israel, el día que les interrumpa alguna de sus sacras festividades religiosas, porque se le viene el “mundo encima”! Los musulmanes sí pueden. Y efectivamente, ejemplo estelar de ello, fue durante la llamada “GUERRA DE YOM KIPUR” (1973). Los países musulmanes, Egipto, Siria, Irak, Jordania, Arabia saudita, Argelia, Marruecos, Libia, Túnez, Kuwait, Sudán, Pakistán y además Cuba, aprovecharon ese momento, para atacar a Israel, cuando los israelíes judíos estaban en su día más sagrado, día de ayuno desde la tarde del día anterior, un tanto desfallecidos por la no ingestión de alimentos… Estos países musulmanes, pensaron sorprender al pueblo judío. ¡Lo habrían exterminado! Ésa sí que hubiera sido una verdadera masacre: la desaparición de Israel.
Gracias a Dios, Israel se sobrepuso al ataque y salió avante y logró la victoria ante ese acto canallesco del mundo Árabe, de atacar a Israel en el día de recogimiento, el día más sagrado.
El resultado de la acción de éste Marzo 30, de las autoridades de Gaza, fue –lamentablemente-, 15 gazatíes muertos y cerca de 1400 heridos.
Si bien, la Autoridad Palestina, o “Palestina Norte”, no entró en ese “baile” y ha mostrado moderación hacia Israel, la “Palestina Sur”, el grupo terrorista Hamás, que dirige Gaza, quiere borrar del mapa a Israel. Además, al no haber unificación administrativa entre la Zona de Judea y Samaria (Norte) con la de Gaza (sur), ha sido imposible para Israel sentarse a la mesa de negociaciones. ¿Con quién habla? Cualquier gesto que Israel haga hacia la Autoridad Palestina (Judea y Samaria), cobijaría a los de Hamás, que quieren exterminarla. ¿Cómo se puede negociar así? ¿Habría confianza? Cualquier medida que adopte Israel a favor de la población árabe de Judea y Samaria, sería una “cuchilla de doble filo para Israel.
(Pero a la media, le resbala que los líderes de Hamás, se hayan robado toda la plata –miles de millones de Euros, que siguen entregando de auxilio -al pueblo gazatí- y tengan al pueblo gazatí en condiciónes de miseria e indigencia. Nadie les ha pedido a éstas ratas del desierto, balances sobre cómo han gastado los millones de Euros que han recibido durante años, de Europa, Estados Unidos, Canadá, Australia, Japón y otros. El problema no es el bloqueo. El problema es que los líderes de Hamas se “embolsillan” la ayuda económica).
Hamás había declarado que la tal manifestación, no era organizada por ellos, sino un acto “voluntario” del pueblo gazatí que quería expresar su protesta por las “*condiciones de opresión* a que están sometidos por el pueblo israelí y blá, blá, blá”. Pero es una infamia que se la cree el mundo entero: 1) Israel permite entrar a Gaza, toda la mercancía que ellos necesitan, a excepción de materiales que pueden servir para fines bélicos. 2) Han visto, -apreciados lectores-, los lujosos centros comerciales que hay en Gaza? ¿Con almacenes de marca? 3) La mayoría de las 15 lamentables muertes, eran activistas de Gaza. Los soldados israelíes, le apuntaban a quien fuese a disparar un arma. Y eso fue lo que aconteció. ¿Otra vez el cuento de *desproporcionado*?
Si los gazatíes hubieran realizado su protesta, sin actos de violencia, no habría habido un solo herido. Ni un solo muerto. Pero lamentablemente los líderes de Hamas, quieren que los gazatíes arriesguen el pellejo, mientras a ellos les resbalan las enseñanzas de Mahoma. Ellos gozan y usufructúan de los dineros que reciben del exterior.