Pedro Castillo, quien asumió la presidencia en 2021, enfrenta ya 18 meses bajo esta medida cautelar, pero presidente de Colombia, Gustavo Petro, apoya al ex mandatario.
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Gustavo Petro respalda a Pedro Castillo
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, expresó su respaldo al exmandatario peruano, subrayando la importancia de buscar soluciones políticas en la región. A través de su cuenta en X (antes Twitter), Petro afirmó: “La posición colombiana ante la violación sistemática de los derechos humanos en Palestina será precisa y contundente. Velaremos por la libertad del presidente Castillo en el Perú”.
El mensaje fue acompañado por una publicación de la Cancillería colombiana, recordando que el 9 de octubre de 2024 Colombia fue elegida, por primera vez, como miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, un hecho clave para su participación en asuntos globales.
Petro también reiteró su compromiso con la protección de los derechos humanos en Venezuela, declarando: “Buscaremos un acuerdo político en Venezuela para garantizar derechos y libertades de su ciudadanía”.
Controversias en torno a Venezuela y Maduro
El pronunciamiento de Petro ocurre en un contexto político complejo, con la proximidad del 10 de enero de 2025, fecha en la que Nicolás Maduro y Edmundo González asumirán la presidencia de Venezuela.
Maduro, reelegido en elecciones calificadas como “fraudulentas” por la comunidad internacional, extendió invitaciones a varios líderes mundiales, incluido Gustavo Petro. Sin embargo, el mandatario colombiano ha mantenido una postura ambigua respecto a su asistencia al acto en el Palacio de Miraflores, argumentando que la decisión dependerá exclusivamente de él como jefe de las relaciones exteriores.
Críticas desde la oposición en Colombia
La postura de Petro generó reacciones críticas desde sectores opositores en Colombia. La senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, cuestionó su posición: “¿Y cuál es su posición ante la violación de los derechos humanos en Venezuela? El silencio y complacencia con la dictadura deja en evidencia que su interés no es por los derechos humanos, sino por proteger a sus amigos criminales”.
