El juicio llega a su fin luego de 4 años, cuando Nintendo demandó al hacker
Gary Bowser es un hacker conocido por su trabajo en el desarrollo de software y hardware para hackear la Nintendo Switch y permitir el uso de juegos piratas. Esto le trajo problemas con Nintendo, quien lo demandó en el 2018. Luego de cuatro años ya se emitió una sentencia desfavorable para Boswer: 40 meses en prisión.
El argumento de la compañía japonesa fue que el trabajo de Bowser y otros colaboradores agrupados en una organización conocida como Team Xecuter le representó pérdidas por $65 millones de dólares.
La fiscalía que llevó el caso había solicitado una condena de cinco años en prisión (60 meses de cárcel) debido al alto perfil del caso. Sin embargo, la defensa de Bowser solicitó una condena de 19 meses de cárcel al argumentar que su cliente era “el menos culpable” en un caso mediatizado por Nintendo.
El veredicto final fue un punto intermedio entre lo solicitado por la fiscalía y los abogados de Bowser: 40 meses.
Además de pasar más de 3 años en prisión, se acordó que el hacker deberá pagar una indemnización a Nintendo de $10 millones de dólares.
El trabajo de Bowser y su equipo Tema Xecuter consiste en un chip que se conecta a la consola a través del puerto USB. Este permite la instalación de archivos de juegos. De acuerdo con Team Xecuter, el chip aprovecha una falla en el modo de recuperación del procesador Tegra de la Switch, que Nintendo no puede corregir mediante una actualización de firmware.
