Mayor parte de proyectiles fue bloqueado
El ejército israelí anunció que una andanada de 150 cohetes, misiles de crucero y drones fue disparada hacia su territorio, la mayoría procedente del Líbano hacia el norte de Israel.
“Durante la noche y hasta primeras horas de la mañana, unos 150 cohetes, misiles de crucero y drones fueron disparados hacia territorio israelí, la mayoría en dirección al norte de Israel”, indica el ejército en un comunicado, en el que añade que hubo “un pequeño número de impactos”.
De acuerdo con The Times of Israel, un adolescente murió al estrellar su vehículo mientras sonaban las sirenas en las primeras horas de la mañana, y al menos tres personas resultaron heridas como resultado del lanzamiento de cohetes.
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Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que Israel había “asestado una serie de golpes a Hezbollah” después de una noche de intensos ataques y disparos transfronterizos esta semana en el Líbano.
“En los últimos días hemos asestado una serie de golpes a Hezbollah que nunca hubiera imaginado. Si Hezbollah no ha captado el mensaje, les aseguro que lo captará”, afirmó Netanyahu en un comunicado.
“Ningún país puede tolerar ataques a sus ciudadanos, ataques a sus ciudades. Y nosotros, el Estado de Israel, tampoco lo toleraremos”, afirmó, prometiendo devolver a sus hogares a los habitantes del norte de Israel desplazados tras casi un año de combates.
El ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, ha acusado este domingo al líder del partido-milicia chií Hezbollah, Hassan Nasrallah, de “incendiar Líbano en nombre de Hamás”, en medio del repunte de los enfrentamientos en la frontera y ante el temor del estallido de una guerra a gran escala.
“Nasrallah está incendiando Líbano en nombre de Hamas en Gaza”, ha dicho en su cuenta en la red social X, junto a una imagen creada por inteligencia artificial en la que se le ve llevando a hombros al líder de Hamás en Gaza y jefe del brazo político del grupo, Yahya Sinwar.
Durante los últimos días se ha registrado un repunte de las tensiones, especialmente tras la oleada de explosiones coordinadas en dispositivos de comunicación supuestamente por Hezbollah, que dejó alrededor de 40 muertos y unos 3.000 heridos. Gran parte de la comunidad internacional, incluida la ONU, ha mostrado su preocupación por lo indiscriminado del ataque.