Japón enfrenta los devastadores efectos del terremoto de magnitud 7,6 que ha dejado al menos 57 muertos y decenas de desaparecidos
Aunque la alerta de tsunami ha sido levantada, Japón aún lidia con las consecuencias destructivas del terremoto de magnitud 7,6 que ocurrió en la costa occidental el día de Año Nuevo. Hasta el momento, se reportan al menos 57 fallecidos y numerosas personas permanecen atrapadas bajo los escombros.
La Agencia Meteorológica de Japón ha cancelado definitivamente la alerta por posibles tsunamis después de los terremotos. La notificación había movilizado a más de 100,000 ciudadanos, instándolos a evacuar sus hogares, y muchos tuvieron que pasar la noche en refugios designados. A pesar de la cancelación de la alerta, se mantiene la advertencia, instando a la población a permanecer alerta ante posibles cambios en el nivel del mar en los próximos días.
Las autoridades han reiterado que el riesgo aún persiste, ya que en la próxima semana podrían ocurrir réplicas con magnitudes superiores a 7. Hasta el momento, se han registrado más de 140 réplicas.
Mientras tanto, las operaciones de rescate y la búsqueda de personas atrapadas bajo los escombros continúan entre las numerosas estructuras colapsadas por los temblores. La cifra de fallecidos asciende a 57, según la agencia japonesa Kyodo, y en las últimas horas, los hospitales han recibido a decenas de heridos, lo que sugiere que esta cifra podría aumentar en las próximas horas.
Leer aquí:
Wajima, la ciudad más afectada
Las víctimas se distribuyen entre las ciudades de Wajima, Suzu, Nanao, Anamizu, Hakui y Shiga, todas ubicadas en la prefectura de Ishikawa, la zona más afectada en términos de daños estructurales.
Entre estas, Wajima ha sufrido considerablemente. Al estar cercana al epicentro del terremoto, esta localidad de 27,000 habitantes ha experimentado el colapso de al menos 25 edificios, muchos de los cuales son residencias particulares. Se estima que hasta 14 personas podrían estar atrapadas en estos edificios, según la información proporcionada por el cuerpo local de Bomberos.
En Wajima, se ha observado el derrumbe de un edificio de siete pisos y un intenso incendio en una zona central cercana a un mercado. Otro incendio ha afectado alrededor de 200 estructuras, persistiendo en algunos puntos, aunque las autoridades indican que las posibilidades de propagación son limitadas.
Actualmente, el número de hogares sin electricidad en toda la prefectura de Ishikawa se cuenta en decenas de miles. Los pilotos de helicópteros que han sobrevolado la zona informan sobre carreteras severamente dañadas, deslizamientos de tierra e incendios en varios lugares. Además, los servicios de transporte aéreo y trenes entre esta región y su vecina Toyama siguen suspendidos.
Actualmente, el número de hogares sin electricidad en toda la prefectura de Ishikawa se cuenta en decenas de miles. Los pilotos de helicópteros que han sobrevolado la zona informan sobre carreteras severamente dañadas, deslizamientos de tierra e incendios en varios lugares. Además, los servicios de transporte aéreo y trenes entre esta región y su vecina Toyama siguen suspendidos.
Todas las fuerzas desplazadas
Después de los acontecimientos, el primer ministro japonés, Fumio Kishida, se reunió este martes con los miembros de su Gabinete y anunció la movilización de una gran cantidad de fuerzas de seguridad y equipos de emergencia del país en los próximos días.
Por otro lado, en una conferencia de prensa, especificó que él mismo dirigirá la gestión del desastre, declarando: «Seré el director general y coordinaré las acciones de las Fuerzas de Autodefensa, la Guardia Costera de Japón, los bomberos y la Policía».
«La prioridad inicial es comprender la situación en el lugar. Hemos estado esforzándonos desde el lunes para recopilar información, pero el acceso a la parte norte de la península de Noto es extremadamente difícil debido al cierre de carreteras», indicó. Además, explicó que utilizarán todos los medios de transporte disponibles, tanto aéreos como marítimos, para llevar alimentos y suministros a todas las áreas afectadas.
Kishida, quien ha estimado en alrededor de mil el número de militares involucrados en las operaciones de rescate, expresó que «con el paso del tiempo, el impacto del desastre se hace cada vez más evidente» y advirtió que «salvar las vidas de las víctimas es una carrera contra el tiempo».
Sin daños en las centrales nucleares
Las centrales nucleares en la zona han sido inspeccionadas y no han sufrido daños a causa del terremoto, según un portavoz del Gobierno japonés: «No hemos recibido informes de daños directos por el terremoto o tsunami en la central nuclear de Hokuriku Electric Power, ubicada en la ciudad de Shiga, que actualmente está fuera de servicio. Además, no se han reportado anomalías en otras centrales nucleares».
Aunque Japón es reconocido como el país más preparado del mundo para hacer frente a los terremotos, con construcciones resistentes y una ciudadanía altamente precavida, el reciente sismo ha sido uno de los peores experimentados por el país en años.
Este incidente también evocó el recuerdo del terremoto de magnitud 9 en la escala Richter y el subsiguiente tsunami que devastaron la parte norte de Japón el 11 de marzo de 2011, resultando en aproximadamente 20,000 víctimas y desencadenando un grave incidente nuclear en Fukushima.
Leer aquí:
Partido Republicano apela expulsión de Trump de primarias en Colorado