Desde noviembre región sigue sin mando desde que Juan Morillo fuera arrestado por corrupción
Hace más de cuarenta días que el Quinto Juzgado de Investigación Preparatoria especializado en Corrupción de Funcionarios de Huaraz, dispuso la prisión preventiva del gobernador de Áncash, Juan Carlos Morillo, por su implicación en un caso de presunta colusión agravada, y desde entonces, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) no ha reconocido ni entregado las credenciales que le corresponden a su reemplazo, el vicegobernador Henry Borja Cruzado.
Morillo fue arrestado el 30 de noviembre de 2020 y el 10 de diciembre del mismo año el juzgado dispuso su detención preventiva por 9 meses. No obstante, que las autoridades del Gobierno Regional de Ancash han remitido comunicaciones al JNE para que cumpla con sus funciones constitucionales.
El 11 de enero de este año la Primera Sala Penal de Apelaciones ratificó los 9 meses de carcelería para Morrillo y sus coacusados, el tribunal electoral se mantiene sin pronunciarse respecto a la designación de Henry Borja.
La necesidad de aplicar las medidas de emergencia para prevenir el avance de los contagios de la COVID-19, así como la atención de los pacientes afectados por la Covid-19, son situaciones que demandan que se formalice el reconocimiento de Borja como reemplazo de Morillo.
En medio de la pandemia, en la que requiere acciones urgentes del gobierno regional, el JNE virtualmente mantiene acéfalo un organismo que debe atender las necesidades de la población afectada.
Las autoridades atribuyen a Morillo haber usado su posición como gobernador regional de Áncash para forzar la contratación de varias empresas para remodelar y habilitar el hospital Eleazar Guzmán Barrón de Nuevo Chimbote (Áncash), con la finalidad de atender a los enfermos por la COVID-19.