Joan Alfaro, artista cajamarquino, llevará su arte al museo que alberga a la Mona Lisa, de Da Vinci, y a La Venus de Milo, de Alejandro de Antioquía.

Joan Alfaro, artista plástico cajamarquino, se ha convertido en el primer peruano en llevar una exposición individual al Museo del Louvre, en Francia.

“Llegar allí, llevar tus obras al museo de arte más importante del mundo, es un sueño para cualquier pintor, jamás creí que me sucedería algo que hasta el momento estaba sólo en el destino de artistas europeos; y ahora, un peruano, un cajamarquino, está cumpliendo sus sueños”, señala el artista.

El 18 de septiembre, Joan, quien tiene veinte años en el mundo del arte y ha realizado alrededor de 20 muestras artísticas en donde, principalmente, plasma imágenes coloridas de la naturaleza y retratos, llevará su obra al mismo museo que alberga a la Mona Lisa, de Da Vinci, y a La Venus de Milo, de Alejandro de Antioquía. Y el honor es para “Carnaval”, una exposición pictórica (óleos, acuarelas, máscaras…) llena de mística y color que estará en exposición en Louvre durante seis días (lo máximo que el museo concede a un artista).

Es aquí, creando “Carnaval”, que Joan ha logrado mostrar su madurez artística. “Soy autodidacta y crecí viendo libros de pintores famosos como Van Gohg (impresionista) y Gustav Klimt (surrealista), de quienes absorbí lo que hoy llamo ‘Identidad Propia’, y lo que ahora llevo a Louvre es muy personal, profesional, exigente y poderoso”, añade.

Pero este es solo el inicio para este artista peruano. “Con los pies siempre en la tierra, quiero conquistar las galerías de arte y museos de Europa, USA, Asia, mi objetivo es que el mundo sepa que existe arte del bueno en Latinoamérica, en Perú, en Cajamarca, y abrir la puerta a otros compañeros que también tienen arte y sueños por cumplir”, concluye.

Sobre Joan Alfaro

Joan Alfaro nació en Cajamarca un 12 de diciembre de 1982. Es un artista plástico empírico, quien durante su infancia, gracias a un pequeño libro de Van Gogh obsequiado por su padre, descubrió que pintar era su pasión. Así, Joan es hacedor de exquisito surrealismo andino que expresa a través de cerámica, grabados y óleos, principalmente. Ha visitado París con rotundo éxito y ya lleva más de veinte muestras en su haber.