Estuvo presente embajador de Israel en Lima, Eran Yuvan
Ricardo Sánchez Serra
Numerosas personas se dieron cita la jornada de solidaridad por los israelíes secuestrados por los terroristas de Hamas. Cánticos y oraciones por su vida y liberación fueron entonados por los asistentes, en un emotivo acto en el que estuvo presente el embajador de Israel Eran Yuvan, el presidente de la Asociación Judía del Perú, José Ackerman y numerosos amigos de Israel, jornada que fue convocada por miembros de la «Marcha de la Vida», liderada por el pastor Ruben Gutknecht.
Este último afirmó que el Perú no puede ser neutral ante la barbarie cometida por los terroristas de Hamas y pidió que nuestro país se ponga al lado de Israel y que declare terrorista al movimiento Hamas, como lo hacen muchas naciones del mundo, además de solicitar la liberación de los rehenes, palabras que fueron replicadas por otros oradores como Bernardo Furman.
El embajador Yuvan hizo un llamado a la liberación de los 134 secuestrados en Gaza, en especial de las 19 mujeres y niños que también permanecen cautivos en manos de los terroristas de Hamas.
Por su parte, el presidente de la Comunidad Judía del Perú, José Ackerman, señaló que “hoy nos encontramos reunidos en solidaridad con Israel, en un momento crucial en el que el pueblo judío enfrenta manifestaciones de antisemitismo en diversas partes del mundo con una intensidad no vista desde la segunda guerra mundial”.
“El antisemitismo -agregó- no sólo ataca a los judíos, sino también a los valores fundamentales de la tolerancia, la diversidad y el respeto mutuo. Debemos unirnos como comunidad global para enfrentar y eliminar esta amenaza. Israel, como hogar ancestral del pueblo judío, ha enfrentado desafíos y amenazas constantes desde su fundación. En estos momentos, debemos mostrar nuestro apoyo incondicional, reconocer el derecho a su legítima defensa y subrayar la importancia de su existencia para la supervivencia y seguridad de nuestro pueblo”.
En otro momento, Ackerman dijo que Hamás utiliza a civiles palestinos como escudos humanos. Ésta es una práctica cruel y despreciable, que deja en evidencia la falta de ética, moral y respeto a la vida. Es imprescindible que condenemos enérgicamente estos actos de terrorismo y trabajemos juntos para combatirlos.
“Demandamos el regreso inmediato de los rehenes sanos y salvos. Nuestros rehenes deben ser liberados sin demora ni condiciones. Debemos instar a la comunidad internacional a trabajar incansablemente para lograr su liberación y garantizar su seguridad”, demandó.
(*) Premio mundial de periodismo “Visión Honesta 2023”