El ministro de Desarrollo e Inclusión Social, Julio Demartini, se encuentra enfrentando una investigación por una presunta obstrucción de la justicia y negociación incompatible por el caso Qali Warma.
Dos días después de que la Fiscalía de la Nación, le iniciara una investigación por la presunta obstrucción a la justicia y negociación incompatible por el caso Qali Warma, Julio Demartini, continúa sin definir su permanencia al frente del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS).
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“Por supuesto que lo estoy evaluando (dar un paso al costado). Hablaré con la presidenta para tomar una decisión. (Hablaré) con ella en el tiempo más corto y tomaré una decisión”, precisó Demartini tras su entrevista con un medio de prensa.
Como se recuerda, la investigación de la Fiscalía contra Demartini, se conoció luego de que se difundiera que el ministro, supuestamente intentó comunicarse con una aspirante a colaboradora de la justicia en el caso que se sigue debido a la entrega de alimentos en mal estado por el antiguo programa de asistencia social Qali Warma.
Ante ello, el titular del MIDIS, se defendió de los cargos y deslizó la posibilidad de que haya una confabulación en su contra. “Es inaceptable verse involucrado en estas situaciones por dichos de terceros o, tal vez, por confabulaciones que deben ser investigadas. ¿A quién estoy perjudicando con todo lo que estoy haciendo? ¿A quién estoy incomodando con los cambios que estoy implementando en el programa, ahora llamado Wasi Mikuna, antes conocido como Qali Warma? No lo sé, pero tengo que seguir adelante porque eso es lo que los niños del Perú se merecen”, señaló.
