La lideresa de Fuerza Popular invocó a sus enemigos políticos a dejar odios, tras señalar la existencia de un complot contra su familia
Keiko Fujimori, se mostró mortificada tras conocer la anulación del pedido de indulto humanitario para su padre el expresidente Alberto Fujimori. En ese sentido, señaló que no es justo que le hayan quitado la posibilidad de que su padre obtenga libertad, por errores de tramitación.
«Acabo de llegar con mi hermana hace un minuto todavía no he podido ver a mi padre. Pero quiero decir que el día de hoy es uno de los días más tristes de nuestra vida. Es extremadamente doloroso saber que un juez de nuestro país, le ha quitado la libertad a mi padre, señalando que él (Alberto Fujimori) no está moribundo y no tiene derecho a un indulto humanitario y en segunda razón señalar que habrían errores en la tramitación y quien tenga que pagar por estas culpas sea mi padre», señaló entre lágrimas.
Consternada por lo sucedido, recalcó que su padre es un hombre de 80 años con la salud deteriorada, el cual, si bien no gozaba de una libertad absoluta, tenía la percepción de vivir en libertad. Por este motivo, Fujimori no descartó la posibilidad de apelar a esta sentencia.