La “IRANización” de SIRIA (I)
Por: ALTER B. HIMELFARB W.
El presente artículo, está basado en un estudio del Instituto de Asuntos Contemporáneos / Fundación Weschler / Jerusalem Center for Public Affairs.
Las noticias internacionales, nos han traído, frecuentemente, abundante información sobre las actividades de Irán en Siria, Líbano y recientemente en Irak.
Ejemplo: Que Hezbolláh, con sede en Líbano, está dirigida y mantenida por Irán. Igual, hemos leído que Irán tiene “milicias chiítas” en Siria…Eventualmente que un convoy de camiones, transportando armas de Siria a Líbano, explotó, por un ataque aéreo… Que unos depósitos de armas, fueron bombardeados, tanto en Quneitra (Siria), como en Bagdad (Irak).
Todas esas noticias, abundantes desde luego, son apenas “la punta del iceberg”.
Háfez al-Ásad, padre del actual mandatario, Bashar-al-Ásad, gobernó a Siria, a partir de un “golpe de Estado”, desde 1971 al 2000, cuando falleció. Gobernó 29 años. Durante este tiempo, permitió la entrada Iraní a Siria, para que la población Sunita (credo liderado por Arabia Saudita) de Siria se convirtiera en Chiíta*, permitiendo la entrada de Imanes y maestros Chiítas, para re-educar a niños como a adultos. Y hoy en día, Bashar al-Ásad, ha permitido que Siria se convierta en una provincia de Irán, tanto como que ya en la mayoría de colegios y universidades, se enseña el persa.
Bashar al-Ásad, comenzó a gobernar a Siria, después de componendas Legislativas, desde el fallecimiento de su padre, hace 19 años, permitiendo, -obviamente-, que las fuerzas armadas Iraníes, anden por toda Siria, ”como Pedro por su casa”. No se puede negar, que los iraníes han hecho, – aparentemente-, obra social. A quienes aceptan convertirse en Chiítas, (refugiados) les permiten volver a sus tierras, les reconstruyen sus viviendas, les dan dinero en efectivo sin necesidad de devolverlo. Les han ayudado a reconstruir colegios y hospitales. Todo ello y probablemente mucho más, a cambio de la conversión de Sunita a Chiíta y de ser fieles e incondicionales a Irán y al Ayatolah.
De ésta manera, -¿Se podría decir, inteligente? IRÁN HA IDO ACORDONANDO LA FRONTERA CON ISRAEL, HA IDO EXTENDIÉNDOSE Y FORMANDO UN CINTURÓN CHIÍTA, A TRAVÉS DE POBLACIONES, ENTREGADAS DE MANERA ABSOLUTA A IRÁN.
En Líbano, repetimos, está el grupo terrorista Hezbolláh. Inmediatamente, sigue Siria. Y ya se puede decir, que a Irak, la tienen “en el bolsillo”.
Además de esos beneficios, como “llapa”, les han dado armamentos, les han construido bodegas con gran cantidad de misiles, listos para atacar a israel, cuando ellos “suban el dedo”.
Hezbolláh, mantiene en Siria 5 milicias chiítas, cada una con varios miles de combatientes, como un 2º frente, cerca al Golán; 4 bases de entrenamiento y otras de Inteligencia y Espionaje. Han entrenado también, en ese “cordón” contra Israel, 42 batallones y 138 brigadas, listas para enfrentar a Israel, al acabar la guerra civil.
Irán, quiere entonces adueñarse de éstos países, convirtiéndolos en un “CORREDOR”, desde el Golfo Pérsico hasta el Mediterráneo. Incluso, se habla de un sistema ferroviario, con esa ruta, satisfaciendo una ruta militar y comercial exclusiva para los intereses de IRÁN.
Ha sido tan minucioso –indudablemente- el trabajo que, Irán ha desplegado en Siria, que Israel tendría que bombardear a toda Siria, para acabar con esos bastiones diseminados en el país. Sin descontar los depósitos subterráneos de armas, que han ido construyendo lenta y pausadamente.
Mientras tanto, Rusia, ha obrado, digamos, profesionalmente, suministrándole asesoría y pertrechos militares a Siria, para la “guerra civil” que aún tiene Bashar al-Ásad, contra un sector de sus propios ciudadanos.
Lo que seguirá en poco tiempo, será el reparto “de la marrana”. Esto es, que tanto Irán como Rusia, buscan beneficios exclusivos, permitiendo explotar sin mayor costo, los recursos naturales de Siria, además de licitar en la próxima reconstrucción de Siria, a todo nivel: Sector Eléctrico, Construcción de Viviendas, Acuerdos de Libre Comercio, Irán controlaría el Puerto de Latakia, cerca de las bases navales de Rusia en Tartus y Latakia.
(*) Miembro A.I.E.L.C.