Sicarios mataron a un conductor de colectivo al dispararle múltiples veces mientras se dirigía a su lugar de trabajo
El domingo 18 de agosto, un conductor de colectivo fue brutalmente asesinado por dos sicarios que le dispararon en múltiples ocasiones en Los Olivos.
La víctima, identificada como Alexandro Huamán Chagra, estaba en camino hacia su lugar de trabajo en la avenida Canta Callao cuando, mientras caminaba por la calle 2 de octubre, fue interceptado por dos individuos en una motocicleta.
Sin dar tiempo para amenazas o reproches, los delincuentes dispararon al hombre hasta en ocho ocasiones, matándolo casi de inmediato.
Actualmente, se desconoce la razón por la que el hombre fue atacado por sicarios. Los familiares de Huamán aseguran que él era una persona tranquila y que el transportista no tenía enemigos.
Sin embargo, después de llevar a cabo las diligencias e investigaciones pertinentes, se reveló que el colectivero tenía antecedentes penales. En 2019, había sido detenido por su participación en una banda criminal y por posesión ilegal de armas.
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El historial de la víctima ha llevado a las autoridades a considerar que el ataque podría estar relacionado con su pasado criminal, sugiriendo que el asesinato podría haber sido un ajuste de cuentas.
El 13 de agosto, a pocas cuadras del asesinato del transportista, se produjo otro delito en Los Olivos, donde una trabajadora de limpieza fue violentamente asaltada en la calle por delincuentes.
A los delincuentes no les importó que la mujer estuviera trabajando por la noche; además de robarle sus pertenencias personales como la billetera y el celular, también le quitaron su uniforme.
Asesinatos en el Perú
En la primera mitad del año, Lima Metropolitana reportó 415 víctimas de homicidio. Durante los primeros seis meses de 2024 se registraron 377 casos, de los cuales solo 18 se resolvieron, lo que equivale a menos del 5% del total (4.77%), según la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri).
El 95.23% de los homicidios (359 casos) aún no se han esclarecido debido a una investigación policial insuficiente por parte de la Dirincri. En estos casos, la carga de trabajo se reparte entre las diversas divisiones y departamentos de la Policía Nacional del Perú (PNP).
