El excanciller Luis Gonzales Posada mostró su preocupación por el conflicto en Medio Oriente, tras el reciente bombardeo de misiles de Irán sobre Israel.
“Estamos ante grupos terroristas que quieren destruir un país (…) y todo terrorismo es enemigo de la civilización y de la democracia”, señaló el ex canciller sobre el ataque con al menos 240 misiles balísticos contra Tel Aviv y Jerusalén.
Al respecto, el excanciller criticó la labor de las Naciones Unidas para resolver problemas de esta naturaleza. “El reciente bombardeo de Irán sobre Israel demuestra la inoperancia de las Naciones Unidas para resolver problemas de esta naturaleza”, expresó.
En esa línea, Luis Gonzales Posada subrayó la necesidad de una intervención más firme y activa del Consejo de Seguridad.
En cuanto a las repercusiones internacionales, el conflicto ha polarizado a los países, con algunos como Colombia y Bolivia rompiendo relaciones diplomáticas con Israel, mientras que otros, como Estados Unidos y la mayoría de los países europeos, muestran su apoyo a Israel.
La tecnología militar avanzada de Israel, como el sistema de defensa conocido como la ‘Cúpula de Hierro’, ha impedido que muchos cohetes iraníes impacten en su territorio, pero la respuesta israelí podría ser devastadora para Irán.
La posibilidad de una escalada nuclear también es una preocupación latente, dado que Irán está cerca de alcanzar la capacidad de producir bombas atómicas.
“Yo vuelvo al tema, esto seguirá mientras el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas siga con los brazos cruzados”, concluyó.
En otro momento saludó la actuación de la Cancillería peruana tras brindar apoyo a los connacionales ubicados en la zona de conflicto.
Como se sabe, la institución ha registrado y monitoreado a los peruanos en Israel, ofreciendo evacuaciones; sin embargo, solo diez han aceptado salir, mientras que más de sesenta han decidido quedarse.
Gonzáles Posada recordó que el conflicto se intensificó el 7 de octubre de 2023, cuando el grupo Hamas lanzó docenas de cohetes contra Israel y atacó un festival de música, resultando en la muerte de 1200 personas y el secuestro de 200 jóvenes.
