El menor fue encontrado muerto al interior de una habitación de un hospedaje, donde también se encontraba su madre quien presentaba lesiones.
Los efectivos de la Policía y agentes del Serenazgo acudieron al hospedaje Amazonas Inn, ubicado en la avenida José Abelardo Quiñones, en el distrito de San Juan Bautista, El personal del establecimiento Reportó que una mujer y un niño se hospedaron en una habitación, pero no salían del mismo desde hace unos días. Personal de limpieza había visto a la mujer recostada boca abajo en la cama, mientras que el cuerpo de su hijo se encontraba a pocos metros de distancia.
Al ingresar al cuarto encontraron una terrible escena. Se llamó al Ministerio Público para proceder con el levantamiento del cadáver del menor y la mujer fue trasladada al Hospital de Apoyo de Iquitos pues había intentado quitarse la vida ingiriendo un líquido con veneno y cortándose las venas. En tanto, los peritos de la oficina de criminalística recolectaron pruebas en la habitación como un vaso desechable decorado con figuras de frutas, una mochila y los zapatos del niño.
La madre del menor, Yara Elizabeth Guerrero Baneo bajo custodia policial, fue atendida y logró ser estabilizada por los médicos. Posteriormente se ordenó su detención preliminar para ser investigada por el presunto delito contra la vida, el cuerpo y la salud en la modalidad de parricidio en agravio de su hijo.
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Tras haberse recuperado, fue trasladada, a bordo de un patrullero, hasta el Departamento de Investigación Criminal (Divincri) del sector donde permanecerá durante 72 horas, según la orden.
De acuerdo a los resultados de la necropsia practicada en el cuerpo del menor, por las características macroscópicas realizadas se evidencian fenómenos cadavéricos por lo que las autoridades presumen que el niño llevaba entre dos y tres días de fallecido.
Se esperan los resultados del examen en patología forense que determinará las causas del fallecimiento del pequeño.
Este es el segundo caso de un menos asesinado en Iquitos que involucra a los padres. Las autoridades deben tomar medidas más extremas para que este tipo de caso ya no se esté repitiendo. Son seres inocentes los que están perdiendo la vida a manos de sus propios padres.
