El grupo Mapfre percibirá 131 millones por desprenderse de esta alianza de bancaseguros.
La reestructuración del sector bancario aún sigue coleando para las aseguradoras. El grupo Mapfre ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que ha cerrado definitivamente la venta del 50% que todavía controlaba en la aseguradora de vida de Caja Castilla La Mancha (CCM).
CCM acabó en la órbita de Unicaja, que pagará a Mapfre 131,4 millones por hacerse con la mitad de esta filial de seguros de vida y planes de pensiones. El precio se corresponde con el valor de mercado, más un 10%, de la tasación realizada por un valorador independiente sobre el 50% de esta compañía. Esta transacción representa para Mapfre un beneficio neto de 1,7 millones de euros.
La gestión de esta cartera de seguros de vida y planes de pensiones la realizará ahora Santalucía Seguros, quien ya acordó con Unicaja extender su alianza. Mapfre ya había avisado a la CNMV de que se había acordado con Unicaja finalizar la alianza para la antigua red de CCM.
El periplo de esa filial para acabar en la órbita de Unicaja es largo y complejo. Caja Castilla La Mancha fue la primera caja de ahorros que tuvo que ser rescatada, en 2009. Entonces, fue Cajastur quien se acabó quedando con el negocio financiero de CCM (incluido los acuerdos de bancaseguros).
Después, Cajastur lideró la creación de Liberbank. Y, finalmente, Liberbank se acabó fusionando con Unicaja. Durante todo este tiempo, Mapfre mantuvo la filial conjunta para distribuir seguros en la antigua red de CCM.
Para Mapfre, la pérdida de esta alianza es un tema menor. En cambio, el mazazo lo sufrió con la absorción de Bankia por parte de CaixaBank. La entidad financiera mantenía un potente acuerdo con Mapfre. Al tener CaixaBank un negocio de seguros de vida propio, rompió con Mapfre. CaixaBank ha tenido que pagar 571 millones de euros por la ruptura de ese acuerdo. Mapfre no estuvo de acuerdo con la valoración realizada por el tasador independiente, al que acabó demandando.