El gesto del cantante, que buscaba ser una lección de humildad, generó críticas por no elegir un auto de lujo.
Marc Anthony sorprendió a su hijo Ryan Muñiz, de 21 años, con la entrega de su primer automóvil: un Toyota blanco decorado con un moño rojo.
El momento fue compartido en Instagram por el vendedor Arian Ramírez, quien agradeció la oportunidad de participar en este gesto especial.
Sin embargo, lo que parecía un acto de celebración rápidamente se convirtió en tema de debate en redes sociales.
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Muchos usuarios cuestionaron la elección del vehículo, argumentando que, dado el estatus financiero de Marc Anthony, el regalo debería haber sido un auto más lujoso.
“Estamos hablando de Marc Anthony, señores… debió regalarle un Lamborghini a ese niño”, comentó la influencer Chiky Bom Bom.
Estas críticas contrastan con la intención del cantante, quien buscaba transmitir una lección de humildad a su hijo.
Carlos Adyan, presentador de “En casa con Telemundo” y amigo cercano de Marc Anthony, defendió la decisión del artista.
“Marc tiene el dinero del mundo, pero nunca ha sido alguien que le guste andar con marcas”, explicó.
Adyan resaltó que el cantante no solo piensa en el valor material, sino también en los valores que desea inculcar en su familia.
A pesar de las opiniones divididas, el gesto de Marc Anthony refleja su estilo de vida sencillo y su enfoque en la educación de sus hijos.
Mientras algunos esperaban un auto de alta gama, otros aplaudieron la elección del Toyota como una muestra de que el éxito no siempre se mide por el lujo.
Esta polémica demuestra cómo las decisiones de las celebridades pueden generar reacciones intensas en redes sociales.
Sin embargo, más allá de las críticas, el regalo de Marc Anthony a su hijo Ryan sigue siendo un momento significativo que va más allá del valor material del automóvil.