Javier Milei cuestionó la transparencia en el manejo de los fondos y la excelencia educativa en las instituciones universitarias de gestión estatal
Este martes, una multitudinaria manifestación tuvo lugar en Argentina, miles de personas expresando su rechazo a los recortes de fondos dirigidos hacia la universidad pública. Esta protesta marca un hito importante en la resistencia contra la política de ajustes impulsada por el presidente ultraliberal Javier Milei.
La capital argentina fue testigo de una movilización, con la presencia de entre 100,000 personas según las estimaciones policiales y medio millón según la Universidad de Buenos Aires (UBA). Además, en ciudades del interior como Córdoba, Rosario y Mar del Plata, se sumaron decenas de miles más en protestas que enfatizaban la importancia de preservar la educación universitaria pública y gratuita.
«Esto es importante para los que estudiamos y para los que trabajamos, porque la educación pública levanta un país», Nicolás Villagra, un estudiante de la UBA de 24 años, declaró a la AFP.
Tras la decisión del gobierno de mantener el mismo presupuesto para este año que el recibido en 2023, a pesar de la inflación interanual que alcanzó casi el 290% en marzo, las universidades han declarado una situación de emergencia presupuestaria.
En respuesta a las protestas universitarias de la semana pasada, el presidente Milei anunció un incremento del 70% en las partidas de gastos de funcionamiento para marzo y otro 70% para mayo. Además, se asignó una suma adicional para los hospitales universitarios. Según el portavoz presidencial, Manuel Adorni, el gobierno considera que esta medida resuelve la discusión en curso.
Durante el fin de semana, Milei expresó dudas acerca de la transparencia en el uso de los fondos y cuestionó la calidad de la enseñanza en las universidades públicas al insinuar que podrían estar siendo utilizadas para actividades comerciales ilícitas y para promover ideologías particulares.
Con aproximadamente 2,2 millones de personas matriculadas en el sistema universitario público, que representa la preferencia del 80% de los estudiantes en comparación con las instituciones privadas, se destaca la importancia crucial de esta opción educativa en un país donde casi la mitad de sus 47 millones de habitantes vive en condiciones de pobreza.
El sistema estatal de educación superior es reconocido internacionalmente por su prestigio académico y por ser la incubadora de los cinco premios Nobel de Argentina, tres de los cuales han sido otorgados en el ámbito de las ciencias duras. Además, este sistema ha sido responsable de notables avances científicos y tecnológicos que han recibido reconocimiento a nivel mundial.
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