Los estudiosos de la Europa medioeval lo reconocen como un protagonista de buena parte de la mitología celta.
Merlín es el mago más famoso de la historia. Hasta el momento no hay certeza absoluta de que haya sido un personaje real, porque aparece citado tanto en textos literarios como en obras históricas. No obstante, hay más certezas sobre la existencia de Merlín que del Rey Arturo según los estudiosos del tema.
Los estudiosos de la Europa medioeval lo reconocen como uno de los protagonistas de buena parte de la mitología celta, así como de innumerables obras literarias y cinematográficas. Hay indicios de que parte de esta leyenda podría ser verdad, aunque ha llegado a nuestros días deformada por la imaginación popular.
Sea que haya existido o no, lo cierto es que a su alrededor se han tejido innumerables leyendas. Esto también dificulta una reconstrucción veraz de su historia. Con todo, se trata de un personaje fabuloso, envuelto en un halo imaginativo y de misterio, que atraviesa buena parte de las historias y los mitos de la Inglaterra medieval.
Desde el punto de vista histórico, quien introdujo el nombre de Merlín a la tradición británica fue Lailoken, un poeta que habitaba en el sur de Escocia.
La otra fuente de la cual emerge este personaje es Gildas el sabio, quien relató las hazañas de Ambrosio Aureliano. Este último podría ser el famoso Rey Arturo. Gildas lo asociaba con la figura de Merlín.
El origen de Merlín
La mayoría de las leyendas que surgen alrededor de Merlín señalan que se trató de un ser con origen maligno, que había venido al mundo para hacer daño. Sin embargo, al crecer el mago empleó todos sus poderes con sabiduría y así se convirtió en hombre sabio y consejero de los monarcas.
Según algunas leyendas, la madre de Merlín era una monja que fue violada por una entidad demoníaca y, por ello, él tenía extraordinarios poderes que iban desde hablar con los animales, cambiar de forma y hacerse invisible, hasta algunos mucho más delicados como controlar el clima y los elementos, los cuales empleaba con sumo cuidado para no enfurecer a la naturaleza (la diosa más poderosa de todas).
Durante su juventud, Merlín se dedicó a atraer a las personas al lado oscuro, pero al crecer decidió hacer precisamente lo contrario y se convirtió en el guía espiritual de su época. Así, se hizo consejero de diferentes reyes, como: el usurpador Vortigern, Ambrosio Aureliano, Uther Pendragon y su hijo, el rey Arturo de Camelot.
En la novela medieval “Lancelot y Ginebra”, se contaba de Merlín lo siguiente: «Conocía la esencia de todas las cosas, su transformación y su renovación; conocía el secreto del sol y de la luna, las leyes que rigen el curso de las estrellas en el firmamento; las imágenes mágicas de las nubes y el aire; los misterios del mar.
Conocía los demonios que envían sueños bajo la luna. Comprendía el grito áspero de la corneja, el volar cantarín de los cisnes, la resurrección del fénix. Podía interpretar el vuelo de los cuervos, el rumbo de los peces y las ideas ciegas de los hombres, y predecía todas las cosas que sucedían después».
Acabó sus días en el bosque de Brocelianda (Bretaña), en una prisión de cristal, puesto que su enamorada eterna, Nimue -al temerle por ser hijo del demonio- lo encerró con el mismo hechizo que él le enseñó
Otras versiones señalan que la madre del mago fue una bruja del bosque o una mujer que habría concebido sin tener contacto con ningún hombre.
Con base en los pocos datos históricos de los que se dispone, la versión más aceptada dice que el nombre de Merlín era Myrddin Emrys. Era hijo ilegítimo de uno de los reyes de Britania, precisamente de Ambrosio Aureliano, quien pasaría a la historia como el famoso Rey Arturo. No hay certeza absoluta de ninguno de estos datos.
MERLÍN Y EL REY ARTURO
La historia del Rey Arturo, un personaje tan enigmático como Merlín, es indisociable de la del mago. Se dice que solamente gracias a la guía de ese famoso hechicero pudo gobernar con sabiduría y rectitud. Todo comienza cuando el rey de Britania se enamora locamente de una mujer casada.
Aprovechando que el esposo de esta se encuentra combatiendo, Merlín interviene para que el rey tome el aspecto del marido ausente y pase la noche con la mujer. El esposo de esta finalmente muere y la mujer es desposada por el rey. Sin embargo, este le había prometido a Merlín que le entregaría el hijo que naciera de esa unión: Arturo. Así lo hizo.
Siendo muy joven, también con la ayuda del mago, Arturo pudo sacar la famosa espada Excalibur, de la roca en la que estaba insertada. Así se convierte en el Gran Rey. Luego este fundó Camelot y gobernó con la guía del hechicero. Este lo acompañó y aconsejó en múltiples situaciones.
EL FINAL DE MERLÍN
La leyenda clásica señala que Merlín se enamoró perdidamente de una joven, cuando él ya era un anciano. Así que se empeñó en enseñarle todos los secretos de su magia, a cambio de que ella se convirtiera en su amante. Le construyó un palacio en un lago y la llamó la Dama del Lago. Con el tiempo, ella comenzó a temerle, pues conocía su origen maligno.
El mismo Merlín le enseñó a ella la forma de atrapar a un hombre. La Dama del Lago entonces lo aprisionó en una jaula de cristal. Ella podía entrar y salir, pero él no. Se dice que se quedó allí para siempre y que aún espera a quien sea capaz de ir a liberarlo.
Hay otra versión de la historia que fue propuesta por el historiador John Matthews. Según esta, la leyenda de Merlín se inspira en un guerrero llamado Myrddin, que habitó en Escocia y era líder de la tribu de los Picts. En el año 573, enfrentó con gran valor una invasión que provenía de Irlanda, en una cruenta batalla. Durante la misma, vio cómo moría toda su familia.
Tras ese hecho, el guerrero enloqueció y se fue a vivir como un ermitaño en el bosque. Tenía extrañas costumbres y por eso adquirió la fama de hechicero. Por eso comenzaron a tejerse una serie de leyendas a su alrededor. Habría sido entonces, un héroe en desgracia, cuya historia se fue deformando gracias a la imaginación popular.
(*) Fuente: https://culturizando.com/quien-fue-el-mago-merlin/