Además, el presidente de México insiste con la liberación y restitución de Pedro Castillo.
Continúan los ataques internacionales. Durante su acostumbrada conferencia de prensa matutina, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), llamó “presidente espuria” a Dina Boluarte, quien ostenta la máxima investidura del Perú desde el pasado 7 de diciembre del 2022, y dijo que su gobierno solo tiene un 15% de aprobación.
“He visto encuestas donde la presidenta espuria tiene el 15% de aceptación, el 85% la desaprueba. Pero todavía menos aprobación tiene el Congreso, los diputados tienen el 90% de rechazo. Y aun así ellos mandan con las bayonetas y con la represión, ya van más de 60 asesinados”, declaró el mandatario mexicano.
Asimismo, AMLO acusó a su homóloga peruana de querer quedarse en el poder hasta el 2026 pese a los pedidos del “pueblo”.
“La mayoría del pueblo del Perú está pidiendo que se convoque de inmediato a elecciones, que el pueblo decida. Es la mayoría, el 80 y 90%, pero se quieren quedar hasta el 2026. Es muy lamentable que esto esté sucediendo y no puede uno callar ante la injusticia”, reclamó el jefe de Estado de México.
En otro momento, López Obrador se reafirmó en su apoyo al vacado expresidente Pedro Castillo y criticó que la Organización de Estados Americanos (OEA) no haya hecho los esfuerzos suficientes para liberar y restituir al golpista en la presidencia.
“Era para que la OEA estuviese convocando a todos los Estados miembros para pedir que se libere al presidente que ilegalmente, injustamente está preso, y se le restituya en su cargo porque fue electo democráticamente. México va a seguir apoyando al presidente ilegalmente destituido y vamos a seguir demandando que se le libere”, dijo.
Además, acusó al Congreso de haber violado la Constitución Política del Perú (CPP) al haber depuesto ilegalmente al “electo democráticamente” presidente perulibrista, quien actualmente cumple un régimen de prisión preventiva en el Penal Barbadillo.
Las cuestionables declaraciones de AMLO se dan al día siguiente de saberse que él se reunió con la ex primera dama Lilia Paredes, a quien su gobierno le otorgó el asilo político semanas después del autogolpe de Estado perpetrado por Castillo.
“La recibí. es una mujer excepcional, humilde, buena, que vino a agradecerme lo que se hizo con ellos, a platicarme de sus hijos que ya están estudiando”, informó el presidente de México al respecto de la reunión. “Está llena de sentimientos y también pidiéndonos que no abandonemos a su esposo. Nosotros consideramos que fue una gran injusticia el haberlo destituido de su cargo porque él fue electo por el pueblo”, agregó.
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