El Ministerio de la Mujer (Mimp) tiene como objetivo alcanzar a 60,000 personas mayores en situación de riesgo en 2025
Para 2025, se proyecta alcanzar a 60,000 personas mayores en situación de riesgo, ampliando su acceso a servicios de protección social integrales y especializados para mejorar su calidad de vida y longevidad.
A punto de celebrarse el Día Nacional de las Personas Adultas Mayores, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp) inauguró la feria de servicios ‘Gratitud con las personas adultas mayores’ en el Parque El Encuentro, ubicado en el distrito de La Victoria, para destacar su papel en la sociedad peruana.
La ministra del sector, Teresa Hernández Cajo, asistió a la actividad y expresó: “Conmemoramos el Día Nacional de las Personas Adultas Mayores y resaltamos su valor, experiencia y sabiduría. Continuamos trabajando para garantizar el reconocimiento de sus derechos y prevenir cualquier vulneración”.
Añadió que el gobierno enfoca su atención en la población adulta mayor a través del programa Gratitud, que reúne el esfuerzo, trabajo y compromiso político de los ministerios de Justicia, Salud e Inclusión Social.
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Estos ministerios colaboran de manera coordinada con los Centros Integrales del Adulto Mayor en las municipalidades. «Todos estamos trabajando para garantizar el reconocimiento de sus derechos«, concluyó.
Durante el evento, que se realizó en colaboración con la Municipalidad de La Victoria, los asistentes disfrutaron de varias presentaciones artísticas. Estas actuaciones fueron realizadas por el grupo de baile de personas adultas mayores de la comuna limeña, quienes recibieron una cálida ovación.
La implementación del Programa Nacional Gratitud refleja el compromiso del gobierno de ofrecer servicios especializados a la población para que puedan disfrutar de una vida más larga y de mejor calidad.
Para alcanzar este objetivo, se fomenta la participación activa y comprometida de las familias y la comunidad en los servicios de protección social del Estado, con el fin de proteger y promover los derechos de las personas adultas mayores a participar en las decisiones familiares, priorizando el diálogo y el respeto hacia las opiniones de todos sus miembros.
