Desde hoy, instituciones educativas suspenden clases presenciales y se implementan alternativas remotas.
El Ministerio de Educación (Minedu) ha ratificado la suspensión de clases presenciales en colegios y universidades de Lima, Callao y Huaral durante esta semana, como parte de las medidas de seguridad por el desarrollo del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). Esta disposición, vigente desde hoy, implica la adopción de clases virtuales o actividades planificadas para los primeros días de la semana, mientras que el jueves y viernes no habrá actividades académicas.
Según el comunicado oficial del Minedu, el cierre busca reducir la congestión vehicular y el flujo de personas en las zonas de mayor afluencia, lo que facilitará la movilización de delegaciones internacionales. Para los primeros días, el sector ha recomendado que las clases se desarrollen mediante plataformas de videoconferencia o la entrega de tareas asignadas con anticipación, con el objetivo de garantizar la continuidad del aprendizaje.
La medida ha generado preocupación entre el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep) y las asociaciones de padres de familia. Diversos representantes han advertido sobre el impacto en los hogares de menores ingresos, ya que muchas familias no cuentan con dispositivos electrónicos ni acceso a internet. “Es una medida que afecta directamente a los estudiantes de zonas vulnerables, donde el acceso a tecnología es limitado o inexistente”, señaló un representante del Sutep, enfatizando la brecha digital que enfrenta el sistema educativo.
Por su parte, varios padres expresaron su inquietud por el desafío que implica adaptar a los estudiantes a un esquema de educación virtual sin los recursos adecuados. “No todos los hogares tienen computadoras o una conexión estable a internet. Para muchos, estas clases virtuales significan una desconexión del aprendizaje”, manifestó un padre de familia.
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Esta situación se suma al contexto de recuperación académica que viene impulsando el Minedu tras las interrupciones por la pandemia, donde se evidenció la necesidad de mejorar la infraestructura digital y de capacitar tanto a docentes como a estudiantes en el uso de herramientas tecnológicas. Si bien algunos centros educativos en zonas urbanas han logrado avances en este aspecto, persisten limitaciones en áreas con mayor vulnerabilidad económica.
A pesar de los reclamos, el Minedu no tiene previsto modificar la medida de suspensión y sostiene que la adaptación a la educación a distancia es una solución temporal que busca priorizar la seguridad de todos.