El movimiento ciudadano denominado Integridad demandó, en una carta pública dirigida al presidente Pedro Castillo, que promulgar la ley que evita la convocatoria a un referéndum de reforma constitucional, sin aprobación previa del Congreso.
El grupo Integridad promovió la aprobación de la Ley que busca evitar la convocatoria a un referéndum de reforma constitucional, sin aprobación previa del Congreso.
Al respecto, tras la aprobación de la ley, ahora demandan su promulgación.
En la misiva pública, recuerdan que en el mensaje brindado por Castillo al país el 28 de julio señaló:
“…una de nuestras principales banderas políticas … es la convocatoria a una asamblea constituyente … Insistiremos en esta propuesta, pero siempre en el marco de la ley y con los instrumentos legales que la propia constitución vigente proporciona. Tengan la seguridad que nunca se hará tabula rasa de la legalidad, sin duda para lograr este propósito tendremos que conciliar posiciones con el Congreso de la República, pues será aquí, en la casa de las leyes donde se tendrán que aprobar las normas correspondientes».
Ante ello, el movimiento Integridad señala que «usted ha reconocido ante el pueblo del Perú, que el único mecanismo para reformar la Constitución es a través del Congreso, y que como Presidente de la República no tiene facultades para convocar a un referéndum de reforma constitucional. Ha reconocido también que, para hacerlo, debe modificarse previamente el artículo 206 de la Constitución, lo cual no ha ocurrido».
«El Congreso de la República ha aprobado el Proyecto de Ley 644-2021-CR, cuya autógrafa ha sido recibida en su despacho el 17 de diciembre de 2021, a las 9:31 horas; que recoge exactamente lo dicho por usted en su Mensaje a la Nación, y deja en claro que no es posible convocar a un referéndum de reforma constitucional, sin aprobación previa del Congreso», agrega en su carta pública.
«Por medio de la presente, solicitamos respetuosamente a usted que, honrando sus propias declaraciones, proceda a promulgar la ley que ha sido remitida a su despacho; demostrando ante el Perú que la “palabra de maestro” tiene un valor inquebrantable, y que es respetuosa de la Constitución vigente», concluye.