El progreso de su recuperación en el área de Hospitalización está siendo positivo
Un niño menor de 5 años, quien sufrió quemaduras graves por fuego directo en la playa Arica, en Lurín, ha sido dado de alta de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en la Subunidad de Quemados del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) San Borja. Ahora está en proceso de recuperación en la sala de Hospitalización, donde incluso ha comenzado a ingerir alimentos sólidos.
La semana pasada, el pequeño identificado como L.Z.Ch. (5 años) recuperó la conciencia y se le retiró el tubo de respiración. Después de mostrar una mejoría notable, el sábado pasado salió de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), lo que llenó de alegría a sus padres. Durante todo este proceso, el personal médico les proporcionó un apoyo emocional invaluable.
Mientras estuvo en cuidados intensivos por quemaduras, el niño recibió un enfoque integral y experto, lo que implicó ser sedado y, al mismo tiempo, recibir tratamiento para el dolor, alimentación especializada e hidratación.
Además, se sometió a dos procedimientos quirúrgicos realizados por cirujanos plásticos especializados. El primero consistió en la limpieza de la piel quemada, seguido por la aplicación de apósitos biológicos de piel de cerdo para prevenir infecciones.
El proceso de recuperación implicó una etapa adicional de intervención quirúrgica, esta vez recurriendo al autoinjerto de piel del propio paciente. Esta segunda cirugía se centró en áreas críticas como el cuello, la cara y el tórax, y se llevó a cabo con notable éxito.
El esfuerzo conjunto y dedicado del equipo médico de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) para pacientes quemados fue fundamental para mejorar el estado del menor, quien había ingresado en estado crítico después del incidente.
Los profesionales de la Subunidad de Quemados están considerando la posibilidad de realizar una tercera intervención quirúrgica, la cual estará sujeta a la evolución del paciente. Recordemos que el pasado 24 de abril, el menor sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en aproximadamente el 21% de su cuerpo. Estas lesiones afectaron áreas críticas como el rostro, el cuello, los miembros superiores y el tórax, con complicaciones adicionales debido a la inhalación de humo y productos de la combustión, lo que comprometió las vías respiratorias.
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