Revela que la humanidad cambiará cuando se descubran los secretos de la gran esfinge de Giza.
Boriska Kipriyanovich, quien fuera llamado a comienzos del siglo XXI «el niño genio ruso» ha hecho nuevamente noticia al revelar que vivió en el planeta Marte o “planeta rojo”, antes de renacer en la Tierra, en una aparente misión de contribuir a salvar a la humanidad terráquea.
Ahora que es adulto ha transmitido a la humana a través de estudios esotéricos que «La vida humana cambiará cuando se descubran los secretos de la Esfinge»
Advierte que hay mucho más por descubrir en la Tierra que apunta a la Gran Pirámide de Giza, que según él esconde grandes secretos.
“La vida humana cambiará cuando se descubran los secretos de la Esfinge. Esta tiene un mecanismo de apertura en algún lugar detrás de la oreja; no recuerdo exactamente”, dice.
Habla su madre
Su madre es doctora y dice que sabía que él era especial tan pronto como levantó la cabeza sin ningún apoyo solo dos semanas después de haber nacido.
Ella afirma que comenzó a hablar unos meses más tarde y que a la edad de un año y medio podía leer, dibujar y pintar.
Mientras Boriska iba a la guardería a la edad de dos años, sus maestros no pudieron evita notar sus increíbles talentos de escritura y lenguaje junto con sus asombrosas habilidades de memoria.
El niño ha afirmado en repetidas ocasiones que anteriormente fue un piloto marciano que viajó a la Tierra.
La madre y el padre de Boriska afirman que no le enseñaron nada a su hijo sobre el espacio cuando eran niños, pero dicen que a menudo se sentaba y hablaba sobre Marte, los sistemas planetarios y las civilizaciones extraterrestres.
Dicen que su fascinación por el espacio pronto se convirtió en su principal interés, y no pasó mucho tiempo antes de que comenzara a decir que había nacido en Marte.
Su mensaje
Los investigadores lo han descrito como un joven extremadamente tímido con una inteligencia superior a la media.
Su excelente conocimiento de los sistemas planetarios ha confundido a expertos de todo el mundo, incluidos los científicos.
Boriska, ahora en el 2021, tiene 25 años, aún afirma que es de Marte, que fue enviado a la Tierra para salvar a los humanos de una guerra nuclear apocalíptica.
Afirma que su propia raza de marcianos fue prácticamente aniquilada en un conflicto nuclear hace miles de años y teme que ahora vayamos en la misma dirección.
Advierte que enfrentaremos el mismo destino catastrófico que «su gente» si no escuchamos sus advertencias apocalípticas.
Niños Índigo
Él dice que no es el único niño del espacio exterior en la Tierra, y afirma que hay otros como él que también fueron enviados aquí en una misión específica para salvar a la humanidad.
Afirma que todos ellos son reencarnaciones y se les conoce como «Niños Índigo» que tienen habilidades sobrenaturales y sobrevivieron a las guerras marcianas.
Según Boriska, muchos marcianos son inmortales y dejan de envejecer a los 35 años. Son muy altos, tecnológicamente avanzados y capaces de realizar viajes interestelares.
Él dijo: «Recuerdo esa vez, cuando tenía 14 o 15 años. Los marcianos estaban librando guerras todo el tiempo, así que a menudo tenía que participar en ataques aéreos con un amigo mío.
Experiencia marciana
Podíamos viajar en el tiempo y el espacio volando en naves espaciales redondas, pero podríamos observar la vida en la Tierra en aviones triangulares.
Las naves espaciales marcianas son muy complicadas. Están en capas, y pueden volar por todo el Universo».
En su exposición, declaró que Marte todavía tiene una civilización alienígena a pesar de sufrir una catástrofe nuclear masiva en el pasado distante.
Seguidamente, explica que la catástrofe que sucedió en Marte fue causada por una guerra nuclear librada entre los «seres» que viven allí. Hubo solo unos pocos sobrevivientes, afirma, que construyeron refugios de protección y construyeron nuevas armas.
El niño afirma que los marcianos respiran dióxido de carbono y que si vinieran a nuestro planeta, tendrían que exhalar de las tuberías llenas de este gas.
¿Qué pasó en Marte?
Niño ruso recuerda que, hace millones de años, Marte albergaba una civilización alienígena. El planeta sufrió cambios climáticos por una guerra nuclear. Ahora esos extraterrestres residen bajo el suelo. Eso recuerda Boriska Kipriyanovich, el niño ruso que proclama haber sido alienígena en una vida pasada. Es sorprendente que científicos de la NASA sí consideren que Marte pudo albergar vida pero que sufrió cambios climáticos devastadores. Sin embargo, es probable que todavía haya vida en algún lado, como abajo del suelo. El tema de la reencarnación es intrigante y hasta científicos como Carl Sagan han estipulado que merece estudios científicos. Pero el psiquiatra Jim Tucker de la Universidad de Virginia sí ha investigado a fondo el tema y elaboró una recopilación de casos de reencarnación. La recopilación aparece en la revista Explore.
En 2015, la NASA anunció un descubrimiento asombroso sobre Marte: el planeta rojo tiene fuentes de agua y posee estaciones. La NASA también mencionó que por sus condiciones y su atmósfera, Marte probablemente haya podido sustentar vida. La siguiente cita es fascinante y la dijo Alfred McEwen, geólogo planetario de la Universidad de Arizona: La posibilidad de vida en el interior de Marte siempre ha sido muy alta. Ciertamente hay agua en algún lugar de la corteza de Marte (…) Creo que es muy probable que haya vida en algún lugar de la corteza de Marte.
