Por: Phillip Butters / Ollanta Humala y Nadine Heredia se dan cuenta que acá en el Perú la soga la tienen al cuello, judicialmente. Que por los delitos por los que serían juzgados obtendrían 35 años de prisión para el expresidente y de 16 para la exprimera dama.
Acá tienen poco caudal político y difícilmente puedan ir a elecciones presidenciales con Nadine u Ollanta como candidatos, porque tendrían un alto rechazo en las urnas.
Lo que están optando es una estrategia, creo yo, inteligente: posicionarse internacionalmente como “Perseguidos políticos”. Por eso ayer dieron una teleconferencia desde Lima para el Parlamento Europeo, en Bruselas, cuyo título fue “La judicialización de la política”.
En esa conferencia participaron también Rafael Correa, expresidente de Ecuador; Manuel Zelaya, expresidente de Honduras, y el conocido líder separatista de Cataluña Carles Puigdemont.
En ese evento, las afirmaciones de Ollanta podrían ser plagios de Alan García, Keiko Fujimori, Susana Villarán, Luis Castañeda Lossio y Lourdes Flores Nano, porque lo que dice Ollanta Humala es: “Hacer un llamado a organizaciones internacionales de defensa de los derechos políticos de la mujer para que vengan al Perú y puedan ver el caso de mi esposa, la exprimera dama del Perú Nadine Heredia, y (también) hacer una cordial invitación a eurodiputados a que puedan venir al Perú a ver in situ aquí, en Lima, todo esto que estoy exponiendo”.
También dijo que acá en el Perú quieren “interrumpir procesos de cambio político, discriminar o expulsar a actores políticos del espacio de la política, a partidos políticos… En nuestro caso al Partido Nacionalista Peruano están pidiendo la disolución de nuestro partido, han incautado sus cuentas y nos impiden participar de los procesos electorales, más aún cuando este año se inicia un proceso electoral (presidencial)”.
Lo que harán ellos es buscar un asilo político en una embajada amiga que podría ser la venezolana, la nicaragüense, la boliviana o hasta la argentina, porque ellos eran admiradores de Cristina Fernández de Kirchner, vicepresidenta de Argentina.
También tienen vinculaciones ideológicas con Nicolás Maduro y la Cuba del hermano de Fidel Castro. Es decir, ellos van a tener cómo buscar un asilo político.
Veamos esto fríamente. A mí me parece que las acusaciones de los fiscales Vela Barba y José Domingo Pérez carecen de sustento legal, porque el financiamiento ilegal de partidos políticos ha sido normado el año pasado como delito tiene de dos a cinco años de pena.
En la época que estos señores recibieron aportes de OAS, Odebrecht, y demás, eso era una irregularidad documentaria o procesal, pero no delito.
Claro que Ollanta y Nadine se enriquecieron, compraron casas, carros joyas, pusieron a sus hijos en los mejores colegios de Lima, etc. pero todo tendría que terminar en un tema de defraudación o evasión tributaria.
Digamos las cosas claras, ese mismo argumento lo puede utilizar Toledo en EE.UU. y se puede quedar allá. Lo mismo Keiko si fuese sido viva y hubiera pedido un asilo político adecuado en Colombia o Paraguay. Ese es el argumento que dio García y que el Mandatario de Uruguay, Tabaré Vásquez le prometió asilo pero luego le traicionó y le negó.
Si eso no hubiera pasado por la presión de Cateriano, Vargas Llosa y de los dirigentes izquierdistas de Uruguay, ahora tendríamos un Alan García asilado en ese país, a Keiko asilada en Colombia o Paraguay, a Ollanta y Nadine en Paris como refugiados, o en La Paz Bolivia. Así que cualquier cosa puede pasar con los aventureros de Ollanta y Nadine, pero quietos no se van a quedar, no tengan duda.