Jorge Fernández Sánchez, director de Publicación Chiclayana “pido la palabra»: “Corrupción de Odebrecht en Olmos es más grave que la habida en en la construcción de la Interoceánica (IIRSA)»
Trasvase de aguas del rio Huancabamba a Olmos pactada inicialmente en US$ 112 mlls. terminó costándole al Estado US$ 580 mlls.
VICTOR ALVARADO
El escándalo de los sobornos millonarios pagados por la empresa Odebrecht para adjudicarse importantes obras de infraestructura, como la Interoceánica, Metro de Lima, entre otras, han puesto en perfil bajo la corrupción ejecutada por la misma empresa en la construcción del proyecto de irrigación Olmos, en Lambayeque, donde la dimensión de la corrupción sería tan igual o más grande a la de aquellas.
El director de la revista chiclayana “Pido la Palabra”, Jorge Fernández Sánchez, en el pasado corresponsal de RPP por más de 20 años, advierte que Odebrecht construyó una gigantesca obra que terminó costándole 5 veces más de lo presupuestado inicialmente.
¿Las denuncias de “Pido la Palabra” son compartidas por la población, pero no por las autoridades, ante las cuáles aparece como una publicación no grata?
“Pido la Palabra” tiene 15 años de existencia con este nombre, en los 15 años anteriores se llamó “La calle”, “La Palabra” y “Pucha” y como “Pido la Palabra” también es un programa radial y televisivo, ahora ambos en receso por falta de auspiciadores. Es cierto, nuestras denuncias son compartidas por la ciudadanía y ninguneada por las autoridades cuestionadas.
ESCÁNDALO
Antes del estallido en Lima del escándalo de corrupción protagonizado por Odebrecht, su publicación destapó la actividad mafiosa de esta empresa en la ejecución del proyecto de Irrigación de Olmos ¿Cómo se dio ésta corrupción?
“Pido la palabra” lo denunció en una entrevista al ingeniero lambayecano Armando Orosco Quiñonez, quién responsabilizó a los gobiernos de Toledo, García y Humala, de que una obra inicialmente presupuestada en US$112 millones fue aumentando sus costos sucesivamente en US$ 185 mlls, US$ 242 mlls, US$ 448 mlls., US 525 mlls, y finalmentre US$ 580 millones, es decir más del quintuple de lo inicialmente pactado, más o menos lo mismo que ocurrió en el proyecto de la carretera Interoceánica, también a cargo de Odebrecht.
El proyecto de Olmos, consistente en el trasvase de las aguas del rio Huancabamba para irrigar 38,000 has. de tierras en Olmos, fue siempre, desde el gobierno de Augusto B. Leguía, un anhelo lambayecano ¿Se ha cumplido este anhelo?
“Pido la Palabra” lo ha dicho y lo repito ahora, la obra no ha beneficiado a ningún lambayecano, sino a un grupo de poder económico foráneo. Odebrecht a través de su empresa H2Olmos, consiguió que ProInversión, modifique las bases de la licitación de las 38,000 has., en las que se establecía licitarlas por unidades de no más de 5,000 has, para adjudicarle 15,600 has. al Grupo Gloria y otras 11,000 has. a Odebrecht, con lo cual ambos se hicieron del 70% de las tierras. Los pequeños y medianos agricultores quedaron fuera. Odebrecht se quedó con el santo y la limosna.
INVESTIGACIÓN
¿Da la impresión que la Fiscalía de Lambayeque no ha emprendido ninguna investigación de la corrupción en Olmos?
En honor a la verdad, el Ministerio Público en este tema, estuvo por mucho tiempo con los brazos cruzados viendo pasar la corrupción por sus narices sin mover un dedo, pero ahora se ha producido una reacción saludable. La Fiscal Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Lambayeque, Ana Zegarra Azula, ha iniciado una investigación preliminar por el delito contra la administración pública en la adjudicación de las obras del proyecto Olmos.
¿A quienes investiga?
Por ahora ha citado como testigos al expresidente regional de Lambayeque, Yehude Simon Munaro, a los ex presidentes de la República, Alejandro Toledo, Alan García Pérez, Ollanta Humala Tasso; a Patrick Barclay Méndez y Sergio Bravo Orellana, del Comité de Proinversión; y a René Cornejo Díaz, exdirector ejecutivo de Proinversión.
¿Qué participación tuvieron en los contratos?
El expresidente Alejandro Toledo y el expresidente regional de Lambayeque, Yehude Simon Munaro, suscribieron el contrato de concesión con la empresa Concesionaria Trasvase Olmos, para la ejecución de trasvase de las aguas del río Huancabamba.
¿Y el expresidente Alan García?
En el 2010, luego del trasvase de las aguas a través del túnel trasandino de Olmos, el presidente Alan García Pérez y la presidenta interina regional de Lambayeque, Nery Saldarriaga, firmaron el contrato de Concesión con H2Olmos SA, fachada de Odebrecht, para la ejecución de la irrigación de las 38,000 has., en el que el gobierno central fue el principal promotor del acuerdo.
¿Y el presidente Humala?
Cuando asume el presidente Humala, ya se había denunciado la corrupción que se venía incubando, y su gobierno podía haberla desarmado, pero optó por convalidarla en setiembre del 2012, con el inicio de los trabajos de irrigación de las 38,000 has.
Punta del iceberg
¿Olmos solo sería la punta del iceberg de una corrupción institucionalizada en la región Lambayeque?
Lambayeque está considerada como una de las regiones de mayor corrupción y delincuencia del país. Allí están la desbaratada banda de extorsionadores y sicarios del “Viejo Paco”, que controlaba a jueces, fiscales, jefes policiales, hasta periodistas y sus remanentes siguen vivos y coleando. El Poder Judicial de Lambayeque está considerado como el más corrupto del país. El saqueo a nuestra riqueza arqueológica se realiza a vista y paciencia de las autoridades. Nadie investiga la extensión de la red corrupta de Odebrecht en el gobierno regional de Lambayeque. La era de corrupción del ex alcalde de Chiclayo, Roberto Torres, sigue enraizada en la comuna. Las ex cooperativas azucareres han sido tomadas por asalto por mafias, con el saldo de más de 20 muertos en Pucala y Tumán, El propio alcalde Cornejo Chinguel ha experimentado el robo de 3 motobombas del total de 8 donadas por la empresa privada para auxiliar a los damnificados de El Niño, etc.
¿Todo parece indicar que el periodismo regional no está a la altura de las circunstancias, con la excepción de “Pido la Palabra”?
La verdad es que la mayoría de publicaciones y programas radiales y televisivos, participan de los enjuagues de la corrupción.